La primera vacuna tetravalente contra la meningitis, que protege de cuatro de los cinco grupos de la bacteria, A, C,W135 e Y, está ya pronta y por ahora se utilizará en Italia en niños y adolescentes a partir de los 11 años, fruto del trabajo de un grupo de investigadores locales que logró desarrollarla en Siena, en el norte del país.
Creada por laboratorio Novartis, es mucho más poderosa y ofrece una protección más amplia y duradera, a diferencia de la que se emplea actualmente, que brinda cobertura contra la variedad C de la enfermedad.
El medicamento ya obtuvo la aprobación del ente regulatorio estadounidense, la Administración de Drogas y Alimentos (FDA) y de su equivalente europeo, la Agencia Europea del Medicamento (EMA).
La utilización en mayores de 11 años se debe a que es el grupo etario en el que mayormente circula la enfermedad y las pruebas clínicas resultan más veloces, pero dentro de pocos meses se presentará ante la EMA, otra variedad de la «supervacuna» apta para niños a partir de los dos meses de edad.
El desarrollo medicinal se basa en la tecnología de las vacunas «conjugadas», es decir las que ligan un polisacárido y una proteína, llamada «transportadora» (carrier).
«La vacuna garantiza una inmunidad de más de dos años, pero nuestros estudios preliminares nos indican que continúa por al menos cinco años. Además se trata de un producto absolutamente seguro y sin peligros», dijo el investigador Rino Rappuoli, uno de los responsables del proyecto.
Una encuesta reciente de la consultora GFK Eurisko entre madres italianas, mostró un alto grado de desconfianza y también de poca información en relación a los tratamientos preventivos de la meningitis. El 67% no piensa que sus hijos se encuentren en riesgo de contraer la enfermedad, y sólo el 34% los vacunó contra ella. «Apenas el 32% sabe que existen distintas cepas de bacterias que la pueden causar, y sólo el 2% sabe nombrar algún tipo de meningococo», afirmó Isabella Cecchini, encargada de las mediciones.
Los pediatras resultan fundamentales en la decisión de las madres de vacunar a sus pequeños. Entre el 34% de las mamás que tomaron esta decisión, el 83% lo hizo por recomendación del médico de niños y sólo un 21% a instancias del facultativo de familia.
Existe además otro tercio de madres que prefirieron no prevenir a sus hijos, aún sabiendo de la existencia de las vacunas: el 25% porque el pediatra no se los propuso, otro 15% por ser contrarias a las vacunas, y un último 15%, por miedo a posibles efectos colaterales negativos. En relación al tema, los especialistas subrayan que las vacunas no son peligrosas y que cada vez muestran mayor eficacia.
Ahora trabajan también sobre una que combata la cepa B de la meningitis, una de las más difundidas en Italia, que se basa en una tecnología ‘revolucionaria’ que se centra en el genoma. “Este año la presentaremos a la EMA para registrarla y así la desaparición de la meningitis estará cada vez más cerca», dijo Rappuoli.