Los hombres que andan en bicicleta al menos cinco horas por semana tendrían menor calidad y cantidad de espermatozoides que los varones que no realizan actividad físisca, reveló un nuevo estudio publicado por la revista Fertility and Sterility.
Aunque la mayoría de los ejercicios parecen tener escasa relación con el semen, un trabajo sobre atletas competitivos vinculó al ciclismo con problemas genitales y urinarios y con una mala calidad del esperma, dijo Lauren Wise, de la Boston University, quien dirigió la investigación.
«No obstante, no sabíamos si hallaríamos una asociación en una muestra de hombres con niveles más moderados de actividad física»-, dijo la experta, aunque advirtió que es demasiado pronto para decir que andar en bicicleta regularmente cause problemas en el semen.
Estudios previos sugirieron que los atletas competitivos tendrían problemas con su esperma. Pero este, en particular, observó la relación entre la salud seminal y el ejercicio en 2.200 hombres promedio que asistían a clínicas de fertilidad.
Cada hombre brindó una muestra de semen y respondió preguntas sobre su salud general y actividad física. Después de ajustar los resultados según el consumo de multivitaminas, el peso corporal, la presión arterial, la elección de ropa interior y otras variables, los autores hallaron que los hombres que ejercitaban regularmente -incluso vigorosamente- no eran más propensos que los varones que no realizaban actividad a tener problemas con la calidad o cantidad de sus espermatozoides.
Sin embargo, cuando Wise y sus colegas observaron específicamente el tipo de ejercicio, notaron que los voluntarios que decían pasar al menos cinco horas por semana en bicicleta eran dos veces más proclives a tener bajo recuento de esperma con escasa movilidad.
Entre los pacientes que no realizaban ejercicio regular, el 23% presentaba bajo recuento de esperma, comparado con el 31% de aquellos que andaban en bicicleta al menos cinco horas semanales.
Casi el 40% de los ciclistas habituales tenían baja cantidad de espermatozoides con buena movilidad, comparado con el 27% de los varones que no ejercitaban. Los golpes o el incremento de la temperatura cerca del escroto explicarían la relación entre andar en bicicleta y la salud seminal, señaló Wise.
La experta indicó que era posible que los hombres incluidos en el estudio no sean representativos de la población general, dado que todos asistían a clínicas de fertilidad y por lo tanto eran más propensos a tener inconvenientes con su semen. Sin embargo dijo:
«Se necesitan más estudios para replicar nuestros hallazgos antes de que puedan considerarse causales”.