Un estudio científico asegura que llegar a la Presidencia del Gobierno de un país acorta la vida dos años y medio. La investigación fue publicada en la edición especial de navidad de la revista científica British Medical Journal, que aborda con rigurosidad científica temas que no son de su área de estudio.
El volumen incluyó tres trabajos sobre la salud de los políticos desde distintos puntos de vista. En uno de ellos, científicos de la Universidad de Harvard, Massachusetts y el National Bureau of Economic Research analizaron a 540 políticos de 17 países que habían participado en elecciones en algún momento entre el año 1722 y 2015.
Anupam B. Jena y su equipo compararon a 279 de ellos que habían llegado al poder con otros 261 candidatos que nunca ejercieron puestos de responsabilidad. Según explicó el propio autor al diario español El Mundo, el objetivo no era tanto compararlos con la población general, sino observar de qué manera la responsabilidad política influía en sus expectativas de vida una vez que llegaban al poder. «Por eso elegimos a otros [candidatos] subcampeones como grupo de control y observamos que los líderes electos viven una media de 2,7 años menos después de unas elecciones que otros políticos», explicó.
Su análisis incluye a 380 políticos ya fallecidos y otros 160 aún con vida. En el primer caso, explica, «simplemente comparamos el número de años que siguieron con vida tras la última elección a la que se presentaron hasta su fallecimiento».
En el caso de los líderes vivos, se realizó un modelo estadístico cruzando la edad de los políticos con las esperanzas de vida media de la población (según tablas oficiales de Francia y Reino Unido).
«La mejor manera de explicarlo es que si alguien que aún está vivo superó lo que sería esperable en términos de años de vida, eso significa que esa persona lo ha hecho bien y no ha fallecido prematuramente» a consecuencia de su cargo político.
Por su parte el doctor Antonio Cano-Vindel, presidente de la Sociedad Española para el Estudio de la Ansiedad y el Estrés (SEAS), explicó a El Mundo que la relación del estrés con la salud fue ampliamente estudiada, aunque todavía no en profundidad en el terreno político.
Pero el estrés si está relacionado con la salud, porque las personas que lo sufren “hacen menos ejercicio físico, realizan más comidas y de peor calidad, y suelen tener una mayor activación fisiológica, que se asocia con mayores niveles de hipertensión y colesterol», explicó el experto español.
El doctor Jena apunta que la falta de tiempo de los mandatarios puede hacer que dediquen menos horas y esfuerzo a cuidar su salud y de hecho el propio presidente de Estados Unidos, Barack Obama, incluido en el estudio, llegó a bromear sobre su evidente envejecimiento, tanto en la manera en que su pelo se volvió canoso desde su llegada a la Clasa Blanca en 2008 y del poco tiempo que posee para jugar al básquet.
Entre los países estudiados figuran España, Alemania, Australia, Austria, Canadá, Dinamarca, Estados Unidos, Finlandia, Francia, Grecia, Irlanda, Italia, Noruega, Nueva Zelanda, Polonia, Reino Unido y Suecia.