“Argentina realiza un enorme esfuerzo para evitar la circulación del virus del dengue en el país, pero la situación en la región es altamente preocupante, especialmente en las localidades fronterizas”, advirtió el ministro de Salud, Juan Manzur, quien pidió a las personas que se movilizan en esas zonas “tomar todas las precauciones para no exponer su cuerpo a las picaduras del mosquito transmisor de la enfermedad”.
“Las fiestas y el inicio de las vacaciones incrementan notablemente el tránsito de personas” en estas áreas, “donde los límites geográficos son sólo una convención”, aseguró el funcionario, y agregó que “está estadísticamente demostrado que la movilidad de personas en esta época del año favorece la diseminación del virus”.
Según la Organización Panamericana de la Salud (OPS), “este año se registraron brotes de dengue con un número total de casos y muertes que sobrepasaron los datos históricos registrados en Paraguay, Panamá y en los países y territorios del Caribe Inglés y francés como Aruba, Bahamas y Santa Lucia. También se observó la introducción del virus del dengue 4 (su forma más grave) en Panamá y en algunos estados del Brasil donde no había circulado anteriormente”, lo que constituye un escenario regional complejo que mantiene en alerta al Sistema Nacional de Vigilancia de la Salud (SNVS).
En ese contexto, Manzur exhortó especialmente a quienes se encuentren o hayan planificado viajar a países limítrofes y del Caribe, donde el dengue se ha extendido, a que “tomen todos los recaudos necesarios para evitar las picaduras de mosquito, ya que esa es la única manera de prevenir esta enfermedad para la que no hay vacuna”; a la vez que instruyó a las autoridades locales para que “intensifiquen las acciones de detección y control del mosquito transmisor del dengue con la misma metodología que se aplicó después de la epidemia de 2009, la que nos permitió, con un trabajo sostenido a lo largo de tres años, tener excelentes resultados y evitar el padecimiento de muchas personas”.
Además, el funcionario nacional pidió a los servicios de salud reforzar la vigilancia de las personas con síndromes febriles compatibles con dengue, dado que “la detección temprana de enfermos es la clave para poder implementar las medidas de bloqueo de foco que permitan contener una eventual situación de brote, así como atender a tiempo a las personas para que no desarrollen la forma grave de la enfermedad”.
Sobre la posibilidad de que se produzca circulación viral en el país, el director del Instituto Nacional “Fatala Chabén”, de la cartera sanitaria nacional, Sergio Sosa Estani, explicó que “sin mosquito transmisor no puede haber circulación de dengue”, y por eso “mantener las medidas de saneamiento ambiental tanto individuales, como las que se implementan a nivel nacional, provincial y municipal, son una herramienta fundamental para la prevención de la enfermedad”, sostuvo el experto.
En Argentina, el comportamiento del dengue es epidémico y la ocurrencia de casos se restringe a los meses de mayor temperatura, en estrecha relación con la aparición de brotes en los países limítrofes, por lo cual “en cada temporada la circulación de dengue en territorio nacional es un escenario esperado”, destacó Sosa Estani.
A su vez, el especialista advirtió que “los diferentes actores sociales y las áreas técnicas están preparadas para sostener las acciones que permitan evitar que se instale la circulación o, en caso de aparecer, que se expanda”.
Los números del dengue en la región
Datos oficiales proporcionados por la OPS , indican que durante 2011 los Estados Miembros de la organización notificaron 979.774 casos de dengue, de los cuales 15.860 presentaron formas graves que requirieron hospitalización y 692 fallecieron. En un informe distribuido por el organismo internacional se consigna que la tasa de letalidad de la enfermedad prácticamente se duplicó, pasando de 2,27 en 2010 a 4,36 en 2011.
Los resultados alcanzados por Argentina en la lucha contra el dengue muestran un descenso sostenido de casos desde la epidemia ocurrida en 2009, que afectó a cerca de 26.000 personas y produjo cinco decesos. Tras la llegada del ministro Manzur a la cartera sanitaria se comenzó a instrumentar, en agosto de ese año, el Plan Nacional de Prevención y Control del Dengue y la Fiebre Amarilla , una iniciativa que actualmente se encuentra en vigencia y que ha logrado que, hasta el momento, en el país no se registre circulación viral y sólo se hayan confirmado tres casos con antecedentes de viaje a países con la enfermedad.
En el último mes, según reportes del Sistema Nacional de Vigilancia de la Salud (SNVS) del Ministerio de Salud de la Nación , el 58% de los casos sospechosos de dengue notificados y analizados por laboratorio se registraron en la región del NEA; el 26% en la región Centro del país y un 15% en la región del NOA. Entre las provincias que registraron mayores notificaciones de casos probables se encuentran Misiones con el 46%, Santa Fe con el 19% y Salta con el 8%, en el mismo período. En la región Sur no se notificaron casos en las últimas semanas.