La Organización Internacional del Trabajo (OIT) adoptó ayer la primera norma laboral internacional sobre el sida con el objetivo de mejorar las condiciones de los seropositivos, en particular en los países en desarrollo donde, según ella, persisten las discriminaciones.
«Esta recomendación constituirá el primer instrumento de derechos humanos sobre el VIH/sida y el mundo del trabajo», se congratuló la directora del programa de la OIT sobre este tema, Sophia Kisting, refiriéndose a la infección por el Virus de Inmunodeficiencia Humana y la enfermedad del sida. Se trata de fomentar la integración de los seropositivos en su trabajo y de prohibir las prácticas discriminatorias durante la contratación.
Aunque no es vinculante, la recomendación adoptada por amplia mayoría obliga a los parlamentos de los 178 Estados miembros de la OIT, una organización tripartita que reúne a representantes sindicales, empresarios y gobiernos, a debatir el texto y a proponer medidas concretas que permitan hacer avanzar los derechos de los enfermos de sida en el mundo laboral.
Con esta norma, la OIT espera «hallar la forma de hacer frente al estigma y a la discriminación que aún genera la supresión de empleos y dificulta el acceso para la personas que viven con el VIH», explicó otra responsable de los programas sobre el sida, Josée Laporte.
La organización recomienda asimismo a los empresarios proponer nuevas formaciones a los seropositivos que, debido a la enfermedad, no pueden cumplir con sus horarios o determinadas funciones.
Unos 33,4 millones de personas son seropositivas y cada año aparecen 2,7 millones de nuevos casos por infección de VIH, según ONUSIDA, cuyos últimos datos son del año 2008.