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Por primera vez, Argentina producirá anticuerpos monoclonales

La primera planta de América del Sur que producirá anticuerpos monoclonales para el tratamiento de cáncer y enfermedades autoinmunes fue inaugurada ayer. Abrirla requirió una inversión para su construcción «de 15 millones de dólares, la tercera parte aportada por el Estado Nacional», dijo durante la presentación Hugo Sigman, CEO del Grupo INSUD, en diálogo por videoconferencia con la presidenta Cristina Fernández de Kirchner. }
El proceso de construcción de la planta de anticuerpos «comenzó hace 17 años», dijo el empresario, quien aseguró que el emprendimiento «viene a romper con un estigma que decía que lo público y lo privado no podían trabajar juntos en la ciencia». 
«Esto era así porque el sector privado creía que la producción pública iba a ser sólo teórica y el sector público pensaba que los privados venían a apoderarse de las producciones», destacó el empresario del grupo Insud, propietario de la plata PharmADN.  Y agregó que con la construcción de la planta, se demuestra que ambos sectores “pueden avanzar juntos en un nuevo paradigma que combinen ciencia básica con ciencia aplicada». 
El empresario informó que la Argentina «hoy importa el total de los anticuerpos monoconales que necesita” y que esa compra “le cuesta al país 250 millones de dólares”.  “Con esta planta, esto se evitaría y se generaría un saldo explotable», agregó Sigman.
 
En este sentido, explicó que «hay convenios firmados con 25 países para exportar anticuerpos monoclonales», entre ellos con laboratorios de India, Sudáfrica, Argelia, Egipto, Indonesia, Singapur, Myanmar, Malasia, Vietnam, Tailandia, Filipinas, Irán, Rusia, Polonia, Turquía y países de la ex Unión Soviética. 
«Inversiones como éstas nos ponen en la frontera tecnológica y nos permiten encarar el desafío para el sector farmacéutico de sustituir importaciones con producción local y aumentar exportaciones con alto valor agregado, potenciando el desarrollo y la aplicación de la biotecnología», aseguró la ministra de Industria, Débora Giorgi, desde esa planta. La ministra estuvo presente en la planta junto a sus pares de Salud, Juan Manzur, y de Ciencia y Tecnología, Lino Barañao. 
La planta icontó para su construcción con un aporte de $ 2.300.000 del Fondo Sectorial de Biotecnología 2010 administrado por el Fondo Argentino Sectorial (FONARSEC) de la Agencia Nacional de Promoción Científica y Tecnológica, sobre un gasto total de obra civil por 22.100.000 de pesos. 
Ese aporte estatal está incluido en un subsidio de 20.600.000 de pesos que el Ministerio de Ciencia y Técnología le otorgó al Consorcio Público Privado que integran PharmaADN S.R.L., el Instituto Nacional de Tecnología Industrial (INTI), la Universidad Nacional de Quilmes (UNQ), al Instituto de Oncología Angel H. Roffo y a las empresas Romikin S.R.L. y Laboratorios Elea.
La primera planta de América del Sur que producirá anticuerpos monoclonales, una proteína descubierta por el científico argentino César Milstein que se usa para el tratamiento de cáncer y enfermedades autoinmunes fue inaugurada ayer. Abrirla requirió una inversión para su construcción «de 15 millones de dólares, la tercera parte aportada por el Estado Nacional», dijo durante la presentación Hugo Sigman, CEO del Grupo INSUD, en diálogo por videoconferencia con la presidente Cristina de Kirchner.

El proceso de construcción de la planta de anticuerpos «comenzó hace 17 años», dijo el empresario, quien aseguró que el emprendimiento «viene a romper con un estigma que decía que lo público y lo privado no podían trabajar juntos en la ciencia». 

«Esto era así porque el sector privado creía que la producción pública iba a ser sólo teórica y el sector público pensaba que los privados venían a apoderarse de las producciones«, destacó el empresario del grupo Insud, propietario de la plata PharmADN. Y agregó que con la construcción de la planta, se demuestra que ambos sectores “pueden avanzar juntos en un nuevo paradigma que combinen ciencia básica con ciencia aplicada».
 
El empresario informó que la Argentina «hoy importa el total de los anticuerpos monoconales que necesita” y que esa compra “le cuesta al país 250 millones de dólares”.  “Con esta planta, esto se evitaría y se generaría un saldo explotable», agregó Sigman.
 
En este sentido, explicó que «hay convenios firmados con 25 países para exportar anticuerpos monoclonales», entre ellos con laboratorios de India, Sudáfrica, Argelia, Egipto, Indonesia, Singapur, Myanmar, Malasia, Vietnam, Tailandia, Filipinas, Irán, Rusia, Polonia, Turquía y países de la ex Unión Soviética.
 
«Inversiones como éstas nos ponen en la frontera tecnológica y nos permiten encarar el desafío para el sector farmacéutico de sustituir importaciones con producción local y aumentar exportaciones con alto valor agregado, potenciando el desarrollo y la aplicación de la biotecnología», aseguró la ministra de Industria, Débora Giorgi, desde esa planta. La ministra estuvo presente en la planta junto a sus pares de Salud, Juan Manzur, y de Ciencia y Tecnología, Lino Barañao.
 
La planta icontó para su construcción con un aporte de $ 2.300.000 del Fondo Sectorial de Biotecnología 2010 administrado por el Fondo Argentino Sectorial (FONARSEC) de la Agencia Nacional de Promoción Científica y Tecnológica, sobre un gasto total de obra civil por 22.100.000 de pesos.
 
Ese aporte estatal está incluido en un subsidio de 20.600.000 de pesos que el Ministerio de Ciencia y Técnología le otorgó al Consorcio Público Privado que integran PharmaADN S.R.L., el Instituto Nacional de Tecnología Industrial (INTI), la Universidad Nacional de Quilmes (UNQ), al Instituto de Oncología Angel H. Roffo y a las empresas Romikin S.R.L. y Laboratorios Elea.
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