Las autoridades de salud de Nicaragua expresaron hoy preocupación por la expansión del dengue en el país, enfermedad que ha dejado cuatro fallecidos en lo que va del año y al menos 483 contagiados solamente en Managua, la capital.
Así lo indicó María Dolores Flores, directora del Programa de Enfermedades Vectoriales del Sistema Local de Atención Integral en Salud de Managua, adscrito al Ministerio de Salud (Minsa).
Flores dijo a periodistas que en la capital se han registrado por lo menos 4.300 casos sospechosos del virus que transmite el mosquito aedes aegypti, de los cuales 483 ya han sido confirmados.
Del total de los resultados positivos reportados en las unidades públicas de salud, 13 corresponden a dengue hemorrágico, la variante más agresiva del virus, precisó. Sin embargo, la cifra puede ser mucho mayor debido a que no todos los enfermos son atendidos en centros de salud estatales.
El dengue está causando estragos también en Costa Rica y en Honduras, con unas 12.000 y 18.000 personas contagiadas respectivamente y al menos 16 fallecidos.
Para detener la epidemia, el Minsa anunció una campaña de fumigación en los 702 barrios de Managua, con la participación de epidemiólogos, brigadistas voluntarios y 85 miembros de la Unidad Humanitaria de Rescate del Ejército.
La jornada durará dos meses e incluirá más de 300 barrios de las áreas rurales y semi-rurales de la capital, donde se busca destruir el ciclo biológico del mosquito transmisor, que incuba sus larvas en depósitos de agua limpia.
Según datos del Minsa, el año pasado ocho nicaragüenses murieron a causa del dengue, que afectó a unas 2.700 personas a nivel nacional.