Bajar del colectivo o del tren una parada antes de llegar a destino y caminar, estacionar un poco más lejos de la entrada, trasladarse en bicicleta y utilizar las escaleras en lugar del ascensor son algunas de las distintas recomendaciones para abandonar el sedentarismo.
Realizar por lo menos 30 minutos de actividad física diaria, de intensidad moderada, en forma continua o acumulada, proveen grandes beneficios en la salud de los adultos.
Para prevenir el aumento de peso en el contexto de la sociedad moderna puede requerirse una hora por día ejercicio. Mientras que si el objetivo es bajar unos kilos, pueden requerirse acumular 90 minutos diarios de actividad.
En los niños de edad escolar se recomienda una hora por día de actividad ejercicio y una carga horaria en las escuelas de 150 minutos semanales.
Por otro lado, entre una serie de sugerencia para dejar la vida sedentaria se destacan las siguientes: bajar del colectivo o del tren una parada antes de llegar a destino y caminar; estacionar un poco más lejos de la entrada; moverse en bicicleta; utilizar las escaleras en lugar del ascensor; hacer uso de una pelota antiestrés para mover las manos; cambiar de postura cada 20 minutos; mantener las reuniones con tus colegas de pie.
Además, especialistas sugieren para evitar el sedentarismo:
• Levantarse y caminar mientras uno habla por teléfono; mandar menos e-mails y visitar más el escritorio de los compañeros de trabajo; durante la hora del almuerzo, dar un paseo con las personas con las que se comparte el día laboral; caminar hasta el restaurante más cercano y mantenerse activo al mediodía.
• En los tiempos libres, se recomienda: usar patines para pasear; correr por el parque; pasar un día en el campo con la familia; salir con los hijos a dar una vuelta en bicicleta; tomar clases de baile; comprar el pan o el diario caminando; pasear por la ciudad y tratar de conocer sus calles y su historia.
• En el hogar, los expertos sugieren: bañar a la mascota, elongar antes y después de dormir; practicar un poco de jardinería o dedicar tiempo a cuidar las plantas; transformar las tareas domésticas en divertidas; subir y bajar las escaleras; esconder cosas y jugar a descubrir el tesoro con los hijos.
• Además, se recuerda no olvidar regularmente: pedalear en una bicicleta fija; levantarse una hora antes para hacer ejercicio en casa o salir a correr; hacer abdominales; dar un paseo después del almuerzo o la cena.