El tiempo que pasan los adolescentes conectados a las redes sociales los vuelve más susceptibles a fumar, beber alcohol y consumir drogas, según indica un sondeo en EEUU sobre actitudes relacionadas con el abuso de sustancias.
En un día típico, el 70% de los jóvenes del país de entre 12 y 17 años -unos 17 millones de adolescentes- pasaron desde un minuto hasta varias horas en Facebook, MySpace y otras redes sociales, según el Centro Nacional sobre Adicciones y Abuso de Sustancias (CASA, por sus siglas en inglés) de la Columbia University.
Y dentro de ese mismo grupo de edad, los jóvenes más inmersos en las redes sociales presentan cinco veces más posibilidades de fumar; son tres veces más propensos a beber alcohol; y dos veces más susceptibles a consumir marihuana que los que no destinan nada de su tiempo a estos espacios virtuales.
«Los resultados son profundamente preocupantes” indica en un comu|nicado el fundador y presidente de CASA, de CASA, Joseph Califano Jr. Y agregó que “el mundo de la libertad de expresión y del ‘todo vale’ en Internet, la programación de televisión sugerente y las actitudes de ‘qué me importa’ ponen a los adolescentes en un riesgo drásticamente mayor de abuso de sustancias».
Dos empresas se encargaron del relevamiento. La primera, Knowledge Networks, encuestó a 1.037 adolescentes de el grupo etario objetivo y a 528 padres de esos jóvenes a través de Internet. Por su parte, QEV Analytics realizó el sondeo telefónica anual a 1.006 jóvenes de entre 12 y 17 años, haciendo preguntas empleadas por CASA para seguir tendencias.
Los resultados relevaron que la mitad de los adolescentes que habían utilizado una red social el día de la encuesta habían visto fotos de jóvenes «borrachos, inconscientes o consumiendo drogas en esas páginas». Pero incluso más allá de los que las visitan a diario, el 14% de los jóvenes que no habían utilizado uno de esos sitios ese día dijo haber visto este tipo de imágenes en las páginas.
Según el estudio, los jóvenes que habían visto esas imágenes tenían cuatro veces más probabilidades de poder conseguir marihuana, tres veces más posibilidades de adquirir medicamentos de venta bajo receta sin ella y el doble de chances de procurarse alcohol.
Además, aquellos adolescentes que habían visto las imágenes eran dos veces más propensos a pensar que probarían drogas en el futuro, y tendían mucho más a tener amigos consumidores de sustancias ilegales.
«Especialmente preocupante -y alarmante- es que casi la mitad de los jóvenes que han visto esas imágenes las vieron por primera vez cuando tenían 13 años o menos», indica el estudio.
Pero los sondeos, que también interrogaron a adultos, hallaron que nueve de cada 10 padres no cree que los adolescentes que pasan tiempo conectados a las redes sociales sean más propensos a beber alcohol o consumir drogas.
Los autores del informe instan a los padres a presentar un frente unido y consistente ante el consumo de sustancias. También piden a los administradores de las redes sociales que retiren esas imágenes y les corten el acceso a los adolescentes que las cuelgan.
En un comunicado, Facebook ha afirmado: «Nada es más importante para nosotros que la salud y la seguridad de la gente que utiliza nuestro servicio, especialmente los muchos adolescentes que utilizan Facebook». «Nuestros estándares de comunicados prohíben la promoción de drogas, y retiramos esta clase de contenido cuando se nos denuncia», agrega.