Todos dicen estar a “favor de la vida”. Sin embargo, sus posturas son antagónicas. Algunos piensan que el aborto es “matar al niño por nacer”. Otros opinan que garantizar que sean seguros, legales y gratuitos evitaría los decesos de muchas mujeres, en su mayoría jóvenes y pobres.
Otra fue la postura del presidente de la Comisión de Legislación Penal, Juan Carlos Vega (Coalición Cívica), quien dice estar en una “tercera posición” acorde al voto legalista. En ese sentido, presentó un proyecto que modifica al artículo 86 del Código Penal para que se concreten las excepciones no punibles del aborto -cuando peligra la salud de la mujer y en caso de violaciones- sin la intervención de un juez.
El debate apenas comenzó. Y tanto afuera como dentro del Edificio Anexo de la Cámara de Diputados, voces a favor y en contra de la legalización y la despenalización se hicieron escuchar. DocSalud.com dialogó con cuatro de los diputados que ayer fueron protagonistas.
Victoria Donda (Libres del Sur)
“El balance del debate fue muy bueno, me parece que es un triunfo de todos los que venimos peleando por la vida de muchas mujeres que mueren por abortos clandestinos, pero también por la vida de muchos niños, que deben nacer siendo fruto del deseo de sus madres”, indicó la diputada.
Su postura es clara, la de la legalización y la despenalización, por lo que rechazó el proyecto del diputado Vega (que obtuvo dictamen de minoría con sólo su propia firma), por querer “reglamentar” el Artículo 86 del Código Penal. “Es el Ejecutivo el que debe reglamentar, nosotros, los legisladores, legislamos”, apuntó.
Citó que en nuestro país, “una mujer muere cada dos días por causas asociadas al aborto y esa mujer es pobre”, por lo que considera a la interrupción del embarazo legal, segura y gratuita “un paso para la igualdad y para la vida”.
“Queremos equiparar las posibilidades de las mujeres y que no sean condenadas a muerte aquellas que no puedan pagar u$s 1.000, el precio promedio de esta práctica”, concluyó.
Cecilia Merchán (Bloque Juana Azurduy)
“Este es un momento histórico, hoy logramos que se discutan los proyectos de legalización y despenalización y esto es producto de personas y organizaciones que estuvieron insistiendo en esta dirección”, expresó la ex Libres del Sur.
Aunque reconoce “que este no es un tema que esté en la agenda oficial”, la diputada se mostró “más que satisfecha” de haber logrado que la discusión se concrete en el Congreso.
“Sigo creyendo en el sentido de oportunidad política de la presidenta. Cuando note que el conjunto de la sociedad argentina esté dispuesta a tener este debate, yo creo que va a haber libertad de acción y si su equipo es valiente, vamos a tener una ley”, concluyó.
Por úlitmo, destacó que este tema “corta transversalmente a todos los bloques, y en cada partido hay integrantes que están a favor y en contra”.
Alfredo Olmedo (Salta Somos Todos)
“El aborto es una pena de muerte para el niño por nacer. A los bebés se les debe dar una solución desde la vida y no desde la muerte”, dijo el diputado salteño. Para tal fin, el año pasado presentó un proyecto donde proponía apoyo estatal para la embarazada tanto en el plano psicológico como en el económico.
En relación a los embarazos no deseados, Olmedo opinó que aunque se concrete a través de una violación, “la madre siempre va a ser la madre y seguramente va a amar a su hijo”, por lo que cuando lo tenga “va a sentirse feliz toda la vida y no va a tener el remordimiento de haberlo matado”.
Por último, como solución, propone “agilizar la ley de adopción para todas aquellas madres que no tienen todas las posibilidades para contener a su hijo y, de esa forma, beneficiar a tantas otras familias que están esperando un niño para seguir adelante”.
Cynthia Hotton (Valores para mi país)
“Nosotros tenemos en claro que defendemos la vida, y los derechos humanos del más débil, en este caso, los del niño por nacer”, indicó la titular del monobloque, a la par que agregó que “el aborto no es un mero derecho que termina con el problema, porque quienes se lo practican sufren secuelas físicas y psíquicas que son irreversibles”.
La diputada dijo compartir “el diagnóstico de que hay mujeres que mueren por aborto clandestino y también por parto, y que siempre son las más pobres”. Pero para ella, la solución al problema “no pasa por despenalizar, sino por una política de salud pública que contemple centros integrales de contención para la embarazada”.
En relación a las excepciones no punibles contempladas en el Artículo 86 del Código Penal, dice “estar de acuerdo con la primera”, que refiere a la interrupción del embarazo cuando corre peligro la vida de la madre. “En esos casos, se le debe dar a la mujer y a su familia la posibilidad de elegir qué vida preserva”, indicó.
Mientras que en los casos de violaciones a mujeres dementes dijo: “Ese precepto fue escrito originalmente para que no nazcan niños dementes, y una sociedad que respeta los derechos humanos y lucha por la no discriminación no debe discriminar a estos chicos porque tengan una malformación o un defecto”.
Por último, para evitar los embarazos no deseados, propone “mejorar la educación de las mujeres, no sólo la sexual, sino también la integral, así sabe donde recurrir en casos de emergencia”. También sugiere que por ley exista la posibilidad de que la mujer pueda dar al bebé en adopción desde el mismo momento de su nacimiento.