La fibromialgia fue reconocida como enfermedad por la Organización Mundial de la Salud en 1992. El término data de 1976 y es la unión de las palabras “fibro” (fibra o tejido conjuntivo en latín) y los vocablos griegos “mi” (músculo) y “algia” (dolor). Se asocia con una variada gama de síntomas, tanto físicos (como fatiga persistente y sueño no reparador) así como mentales, relacionados con la ansiedad y la depresión.
La terapia no farmacológica es una de las opciones para su tratamiento. Consiste en educar al paciente para mejorar su actual condición de vida. Hacer ejercicio de bajo impacto (aeróbico, natación) en forma regular; terapia física y terapia cognitivo-conductual; considerar además terapias que involucran mente y cuerpo, como yoga, tai-chi o Zigong; meditación con respiración rítmica; terapias complementarias como masajes y acupuntura, trabajo creativo (arte, música, baile). En suma, fomentar la capacidad propia de cada individuo de recuperarse física y emocionalmente luego de un efecto contrario, traumático o nocivo.
¿Verdadero o falso?
El Dr. Fernando Rivera, miembro del Colegio Médico de Estados Unidos, aclara dudas:
1- La fibromialgia sólo afecta a las mujeres: Falso
Si bien es cierto hay una alta prevalencia de esta enfermedad en el sexo femenino de nueve a uno en comparación con los hombres, igualmente los hombres pueden verse afectados por ella.
2- Es una enfermedad propia de la vejez: Falso
Es cierto que a mayor edad aumenta el riesgo de sufrirla, pero afecta principalmente a personas de entre 20 y 50 años e incluso se han documentado casos de niños aquejados de fibromialgia.
3- La fibromialgia no es en realidad una enfermedad, sino sólo un trastorno psicológico: Falso
Aunque todos los estudios realizados a nivel internacional sobre ella no logran precisar las causas que la provocan, en general hay consenso en que la fibromialgia es una enfermedad real. Tomografías cerebrales confirman una mayor respuesta al dolor en pacientes que la padecen respecto de quienes no la presentan. Además, el dolor crónico y permanente, su principal característica, puede llevar al paciente a un cuadro depresivo severo.
4- La persona aquejada de fibromialgia no tiene una buena calidad de vida: Falso
Gracias a los estudios e interés de la comunidad médica y científica sobre ella, hoy existen medicamentos y terapias complementarias que permiten, a quienes sufren fibromialgia, tener una calidad de vida aceptable.
5- Generalmente no tiene un buen pronóstico: Falso
Las terapias no eliminan el dolor completamente, pero si el paciente mantiene activos sus músculos, huesos y articulaciones, la fibromialgia no los dañará. Además, puede aprender técnicas de control del dolor y realizar ejercicio aeróbico ligero pero constante (como caminar) que, se ha demostrado, permite que el dolor no aumente y que incluso pueda aliviarse.
6- La fibromialgia es una enfermedad autoinmune: Falso.
La fibromialgia no es una enfermedad autoinmune, ya que, a diferencia de éstas, no hay virus, ni bacterias, factores internos o externos que provoquen una respuesta exagerada del sistema inmunológico del individuo. Sí es cierto que algunas personas pueden padecer una o más enfermedades autoinmunes, entre ellas, lupus, esclerosis múltiple o enfermedad de Crohn, pero además de la fibromialgia.