El profesor holandés Ab Osterhaus, virólogo y uno de los máximos referentes mundiales en materia de influenza, afirmó que si bien «puede haber en cualquier momento una nueva pandemia», la Argentina «está preparada para enfrentarla en cuanto a vacunación, cuyo nivel es alto en los grupos de riesgo».
El experto, que visitó Buenos Aires para participar del 18° Congreso Internacional de Enfermedades Infecciosas, que finalizó ayer, disertó en el simposio «Pandemia: esperando lo inesperado» a 100 años de la llamada «gripe española», que en 1918 afectó a un tercio de la población mundial causando la muerte de al menos 50 millones de personas.
«Vimos cuatro pandemias en los últimos 100 años: en 1918 la gripe española, con la cepa H1N1, que mató a 50 millones de personas; en 1957 la gripe asiática, en la que circuló la cepa H2N2 y murieron entre 1 y 4 millones; en 1968 la gripe de Hong Kong, en la que se vio la cepa H3N2 y se estima que murió la misma cantidad de gente que en el caso asiático, y por último la gripe mexicana, que en 2009 causó entre 0.2 y 0.3 millones de muertes con la cepa H1N1», explicó a Télam el virólogo.
El también director fundador del Centro de Investigación de Infecciones Emergentes y Zoonosis de la Universidad de Medicina Veterinaria de Hannover, Alemania, señaló que «todos los años hay brotes de gripe, y como hay muchos virus que la causan y además mutan, siempre puede aparecer una pandemia».
«Por ejemplo, este año está circulando en Estados Unidos la cepa H3N2, mientras que en Europa circula un virus B, completamente distinto. Pero no es peor que otros años, la situación es similar», tranquilizó.
En Estados Unidos, se estima que desde 2010 se contagian al año entre 9 millones y 35 millones de personas con cualquier tipo de gripe, mientras que entre 12.000 y 56.000 mueren.
«La vacuna es una buena protección, y hay que estar preparados porque el virus, que surge del mundo animal -de las aves-, no se puede controlar, por lo que en algún momento va a llegar. Por eso es importante estar lo más preparados posible para la próxima pandemia, que no se puede predecir. Es como una ruleta rusa», enfatizó en diálogo con esta agencia.
Consultado sobre cómo está preparada la Argentina para enfrentar una posible pandemia de gripe, Osterhaus afirmó que si bien ante una situación de esa dimensión «se debe actuar a nivel internacional«, el país «está preparado en términos de desarrollo de vacunas y muestra un alto nivel de cobertura en grupos de riesgo (menores de dos años y mayores de 65, embarazadas, pacientes con enfermedades crónicas y personal sanitario)».
«Tenemos tecnología para hacer la vacuna, pero desde que se descubre la cepa hasta que se produce la primera dosis para humanos pasan unos seis meses. Tenemos que reducir ese lapso, creemos que se podría reducir a tres meses dentro de los próximos 10 años», adelantó.
Y continuó: «La importancia de asegurar tasas altas de cobertura de vacunación antigripal en la población de riesgo no sólo es una forma de reducir el número de muertes y complicaciones, sino también una herramienta fundamental para reducir el riesgo de enfermedad y muerte ante una eventual pandemia».
Según Osterhaus «todos los países deben contar con un ‘plan de preparación para una pandemia’, y son los Estados «los responsables de desarrollar, testear, implementar y actualizar ese plan, además de dar soporte y estimular la investigación científica».
Según datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS), se estima que al año mueren por enfermedades respiratorias asociadas a influenza unas 650.000 personas.