Entre los síntomas prolongados de la Covid-19 los investigadores agregaron la caída de dientes, a los dolores musculares, la niebla cerebral y el dolor en los nervios del cuerpo.
Una mujer de 43 años, llamada Khemili, de 43 años, que vive en Voorheesville, Nueva York, consultó a un grupo de apoyo on line de ex pacientes recuperados de Covid-19 luego de que se le cayera un diente sin ningún antecedente previo de malestar en la boca. Ella había padecido la enfermedad en la pasada primavera neoyorquina y nunca se pudo recuperar por completo. En el grupo de apoyo manifestaron además como síntomas prolongados la sensibilidad en las encías y la rutura de dientes. Sin embargo, aun no hay pruebas acerca de que la infección pueda traer como consecuencia la pérdida de dientes.
«Es extremadamente raro que los dientes se caigan literalmente de sus órbitas», dijo el Dr. David Okano, un periodoncista de la Universidad de Utah en Salt Lake City.
Pero los problemas dentales existentes pueden empeorar como resultado de la COVID-19, añadió, especialmente cuando los pacientes se recuperan de las infecciones agudas y se enfrentan a sus efectos a largo plazo.
Y algunos expertos dicen que los médicos y los dentistas deben estar abiertos a tales posibilidades, especialmente porque más del 47% de los adultos de 30 años o más tienen alguna forma de enfermedad periodontal, incluyendo infecciones e inflamación de las encías y el hueso que rodea a los dientes, según un informe de 2012 de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades.
«Estamos empezando a examinar algunos de los desconcertantes y a veces discapacitantes síntomas que los pacientes están sufriendo meses después de haberse recuperado de COVID«, incluyendo estos relatos de problemas dentales y pérdida de dientes, dijo el Dr. William W. Li, presidente y director médico de la Fundación de Angiogénesis, una organización sin fines de lucro que estudia la salud y la enfermedad de los vasos sanguíneos.
La caída de los dientes sin sangre es inusual, dijo Li, y proporciona una pista de que podría haber algo en los vasos sanguíneos de las encías. Es posible que el virus haya dañado los vasos sanguíneos que mantienen los dientes vivos en los supervivientes de COVID-19; eso también puede explicar por qué los que han perdido sus dientes no sienten dolor.
También es posible que la respuesta inmunológica generalizada, conocida como tormenta de citoquinas, se esté manifestando en la boca.
«Si la reacción de un portador de COVID a largo plazo está en la boca, es un mecanismo de defensa contra el virus«, dijo el Dr. Michael Scherer, un periodoncista de Sonora, California.