La diabetes es un trastorno metabólico caracterizado por el aumento de concentración de glucosa en sangre. La insulina es una hormona que ayuda a convertir la glucosa en la energía celular necesaria para que las células metabolicen los nutrientes.
La diabetes tipo uno, conocida como diabetes juvenil, generalmente se manifiesta en la juventud. El páncreas produce dosis insuficientes o nada de insulina y ésta debe ser provista de manera externa. Esto se consigue por medio de inyecciones, píldoras o bombas de insulina portátil.
Con el tipo de diabetes dos, que se manifiesta normalmente en la adultez, el páncreas funciona correctamente. Sin embargo, el cuerpo es resistente a la insulina o no utiliza la insulina correctamente. A veces, este tipo de diabetes puede ser contralada mediante la realización de actividad física y una dieta adecuada, siempre monitoreando la glucemia.
La glucemia alta es un indicador de los dos tipos de diabetes, pero a veces pueden presentarse casos de glucemia baja (hipoglucemia), especialmente en la diabetes de tipo dos.
Muchos síntomas de la diabetes pueden confundirse con insuficiencia adrenal o con problemas de tiroides, así como con fibromialgia.
La comida ideal
Obviamente, los alimentos con alto índice glicémico deben ser evitados. Estos incluyen almidones refinados, carbohidratos, azúcar, jarabe de maíz de alta fructosa, miel, caramelos, tortas y galletitas, etc.
Los sustitutos de azúcar sintéticos consumen las células del cerebro.
Evite el consumo de comidas rápidas y productos de supermercados, ya que muchos poseen azúcar a pesar de que no lo parezcan. Compre alimentos orgánicos al por mayor.
Para agendar y agregar a la mesa
1- Vegetales, especialmente verdes, son productos que puede consumir a diario. Vegetales al vapor o ensaladas de verduras crudas son beneficiosas para cualquiera por su alto contenido de nutrientes, especialmente si posee bajo nivel glicémico. Condimente con aceites vegetales vírgenes sin procesar, menos de soja, y vinagre o limón.
2- Incluya porciones de palta en su ensalada para variar el sabor y obtener una buena nutrición. El alto contenido de omega-3 cura las inflamaciones crónicas, que están generalmente asociadas a la diabetes, y que producen otras enfermedades más serias. Las paltas son una excelente fuente de proteínas.
3- Las nueces son una buena fuente de omega-3 con bajo índice glicémico. Puede incluirlas en ensaladas o vegetales para darles más sabor. Otras frutas secas sin sal pueden ser consumidas.
4- Pescados fresco (silvestre, no de criadero) especialmente atún o salmón de agua fría, son otras fuentes de omega-3 con bajos niveles de índice glicémico. Todas las demás carnes son altas fuentes de proteínas, con bajo índice glicémico. Intente consumir solo animales alimentados de pastoreo para evitar la excesiva crueldad animal y los antibióticos y hormonas que se le inyectan en los criaderos.
5- Los granos engañan. Por supuesto, hay que evitar el consumo de granos procesados. Pero algunos granos integrales tienen más índice glicémico de lo que uno piensa. El trigo integral es uno de ellos. La quinoa y alforfón son buenos sustitutos. El arroz integral orgánico funciona en algunos diabéticos ya que es un carbohidrato complejo que no se convierte en glucosa tan rápidamente. Se recomienda no consumirlo a diario.
6- Las legumbres pueden agregarse a un plato de arroz integral. Poseen muchas proteínas y fibras con bajo índice glicémico. También pueden mezclarse con vegetales y comerlos como guarnición.