“Noelia María”, la beba que fue hallada el sábado pasado abandonada en medio de un intenso frío, permanece estable internada en el servicio de Neonatología del hospital provincial “Gandulfo” de Lomas de Zamora, donde fue trasladada por la Policía luego de que una vecina la encontrara en el Camino Negro y Laprida.
La pequeña, que aún conservaba parte del cordón umbilical, pesaba 1.600 gramos y presentaba un cuadro de hipotermia, por lo que “inmediatamente se le dio calor y empezó a alimentarse por suero y sonda”, señaló Mónica Malchiodi, directora ejecutiva del Gandulfo.
Respecto al estado de salud, Malchiodi detalló que “por suerte la beba se recupera satisfactoriamente y se encuentra hemodinámicamente compensada, aunque por tratarse de una chiquita prematura hay que estar alertas y mantenerla controlada por si surge alguna complicación”.
“Según los cálculos, la beba nació a las 35 semanas de gestación”, indicó Malchiodi, y agregó que “tanto la jefa del servicio, Silvia Pérez Luzuriaga, como todas las enfermeras de Neonatología la están tratando con un amor y una sensibilidad extraordinaria”.
Por su prematurez aún no tiene desarrollado el reflejo de succión y debe alimentarse por suero y por vía enteral, mediante el uso de sonda nasogástrica, mecanismo que hasta el momento es tolerado de manera satisfactoria por la niña.
Noelia María -así fue bautizada simbólicamente- fue encontrada a la intemperie envuelta en una sábana con una temperatura corporal de 27 grados, cuando lo normal son diez grados más. Hasta el momento ningún familiar de la pequeña se presentó en el hospital para reclamarla.
