Una nueva molécula anticancerígena y antimetástasis que abre las puertas a nuevas terapias alternativas contra el cáncer acaba de ser descubierta por un equipo internacional de investigadores.
La molécula, bautizada «Liminib», impide el movimiento y la multiplicación de las células enfermas, en particular las resistentes a tratamientos de quimioterapia, explicó en un comunicado el Centro Nacional de Investigación Científica francés (CNRS).
La principal característica de «Liminib», resultado de una década de trabajo durante la que se testaron más de 30.000 moléculas, es que se trata de una inhibidora de la quinasa o enzima «KIM», cuya presencia excesiva en los carcinomas (cánceres) invasivos favorece la multiplicación de las células y la propagación de la enfermedad.
Esta enzima regula la dinámica del esqueleto interno de la célula, formado por una red de fibras cuyos filamentos le permiten moverse y reproducirse, mientras que la molécula
«Liminib» estabiliza y bloquea esa red de fibras, impidiendo que se multipliquen y sus resultados en un estudio piloto realizado en ratones son «alentadores», según el CNRS, que participó en la investigación junto a otros organismos franceses (el CEA, el Inserm y el Instituto Curie) y científicos de Australia y el Reino Unido.
Se constató en el ensayo «no sólo una buena eficacia, sino también una buena tolerancia» por parte de los animales tratados.