La vacuna contra la hepatitis B, que reciben actualmente en Argentina los menores de un año y los niños de 11 para completar esquema en caso que lo requiera, fue oficialmente incorporada al Calendario Nacional de Vacunación para toda la población adulta, con carácter gratuito y obligatorio.
La resolución que lleva el N º52/2014 y que fue publicada en los últimos días en el Boletín Oficial la Resolución, fue firmada por el ministro de Salud de la Nación, Juan Manzur.
Con la medida se busca proteger contra esta patología a 10.800.000 personas en todo el país. En palabras de Manzur, el objetivo de la estrategia es “favorecer el acceso universal de esta vacuna para el total de la población, para así eliminar la hepatitis B de la Argentina».
«Gracias a la vacunación en menores de un año y al control que se realiza a los 11, se registra en el país una disminución importantísima de los casos de hepatitis B en los menores de 20 años. Por eso estamos ampliando esta estrategia a los adultos, franja etaria en la que se producen la mayoría de los nuevos casos», agregó el funcionario.
Se estima que cerca de 2 mil millones de personas en el mundo están infectadas con el virus de la hepatitis B, de las cuales unas 360 millones tienen infección crónica, con el consiguiente riesgo de enfermedad grave y muerte por cirrosis hepática o cáncer de hígado. Estas complicaciones, sin tratamiento, causan entre 500 mil y 700 mil muertes cada año en todo el mundo.
En Argentina, esta enfermedad es la primera causa de hepatitis fulminante en los adultos. Se transmite con una eficacia del 30 al 60% a través de las vía sexual, parenteral y vertical. A su vez, según especificó la jefa del Programa Nacional de Control de Enfermedades Inmunoprevenibles del Ministerio de Salud, Carla Vizzotti, puede transmitirse también por “transfusión de sangre no segura, drogadicción endovenosa o accidentes cortopunzantes”
El 10% de los portadores del virus puede evolucionar a hepatitis crónica, y eventualmente desarrollar cirrosis o carcinoma hepatocelular con potencial compromiso de la vida; mientras que los neonatos hijos de madre con infección por hepatitis B tienen mayor riesgo de evolucionar a formas crónicas, cirrosis y carcinoma hepatocelular que la población adulta, se informó desde la cartera sanitaria.
Con la decisión de que la vacuna sea gratuita y obligaroria para todas las personas de a partir de 20 años no inmunizada busca erradicar el virus del país. Es que a partir de la introducción de la inmunización al calendario en el año 2000 para los recién nacidos, en los niños y niñas de 11 años en 2003, la vacunación obligatoria en el personal de la salud y las recomendaciones de aplicación de los grupos en riesgo, disminuyó la frecuencia de infecciones en los niños, aunque siguen notificándose casos en adolescentes y adultos no inmunizados o con esquemas incompletos.
Vizzotti señaló que nuestro país es considerado «de baja endemicidad” para el virus de la hepatitis B. “No obstante, ello significa que el 2 por ciento de la población puede tenerlo, es decir, 800 mil personas», agregó.
Por eso, la funcionaria remarcó la importancia de que «todos los adultos, tanto hombres como mujeres sin importar la edad, se apliquen las tres dosis para prevenir nuevas infecciones en el país».
A tal fin, el país cuenta para este año con 13 millones de dosis. «La vacuna está disponible y la población se la puede aplicar de forma gratuita en todos los centros de salud pública y hospitales del país», señaló Vizzotti.
Según el artículo 3º de la resolución, «se considerará esquema completo a la administración de 3 dosis de la vacuna, la segunda con un intervalo no inferior a 4 semanas de la primera y la tercera con un intervalo no inferior a 5 meses de la segunda». Por otra parte, la medida establece que «no se requerirá la presentación de una orden médica» para su aplicación.