En la actualidad, existen muchas intervenciones estéticas que permiten mejorar el aspecto de los ojos, su contorno y la mirada, condicionados por el paso del tiempo y la fuerza de gravedad que actúan sobre el rostro y pueden originar un aspecto envejecido, que incomoda a muchas personas.
En esta oportunidad, la más elegida, a raíz de su efectividad, es la blefaroplastia. De hecho, las estadísticas de las sociedades de estética a escala mundial coinciden en que la blefaroplastia es una de las cirugías estéticas más utilizadas tanto en el caso de hombres como de mujeres.
El Dr. Rodolfo Vigo, jefe del Servicio de Oftalmología del Hospital Universitario Austral y especialista en cirugía de párpados (MN 103053) explica «Es una cirugía estética que tiene un claro objetivo: corregir el exceso de piel en los párpados y armonizar esa zona del rostro». Y agrega: «Su principal función se basa en tratar las bolsas que se generan en la zona inferior de los ojos y la caída natural de los tejidos que rodean al ojo. En la mayoría de los casos, estos problemas tienen un origen genético. Con la cirugía se logra refrescar y rejuvenecer la mirada, eliminando el aspecto de cansancio».
La intervención se realiza de manera ambulatoria. “Se efectúan delgadas incisiones que siguen los surcos o arrugas naturales en los pliegues del párpado superior y en el inferior, justo por debajo de las pestañas. De esta manera, las cicatrices quedan ocultas», detalla el especialista.
«En el caso de que existieran bolsas grasas en el párpado inferior, sin exceso de piel, se realiza un abordaje llamado ‘transconjuntival’, es decir en la parte interna del párpado, sin dejar cicatriz externa», añade.
En cuanto a las cirugías más modernas, la novedad es que de un tiempo a esta parte se puede realizar con láser de CO2. «Esta técnica permite reducir los tiempos de la cirugía, al ofrecer la posibilidad de disecar los tejidos de una forma más eficaz, además de requerir de un menor tiempo de recuperación», indica el especialista en cirugía de párpados del Hospital Universitario Austral.
«Esta cirugía es ambulatoria y no requiere internación. La anestesia es local con sedación. El paciente está consciente y despierto durante la cirugía, pero no tiene sensación de dolor», completa.