Una dieta rica en aceite de oliva, nueces, pescado, aves de corral y ciertas frutas y verduras podría tener un efecto poderoso en la prevención del mal de Alzheimer, reportaron investigadores.
La gente que consumió nutrientes beneficiosos para la salud cerebral tenía un 40% menos de riesgo de desarrollar la enfermedad en comparación con otras personas, encontraron Yian Gu, investigadora de la Universidad de Columbia en Nueva York, y sus colegas.
«Es probable que la dieta sea la forma más sencilla de modificar el riesgo de contraerla», dijo Gu, cuyo estudio aparece en Archives of Neurology. Además, la investigadora sostuvo que debido a que no existe una cura para el Alzheimer, la prevención es vital, especialmente cuando la población envejece.
Mientras otros estudios se han enfocado en nutrientes individuales, el equipo de Gu evaluó grupos de alimentos altos en nutrientes que han demostrado asociarse al riesgo de desarrollar el mal. Algunos, como los ácidos grasos saturados en la carne roja y la mantequilla, deben ser evitados. Otros, como los ácidos grasos omega-3, ácidos grasos omega-6, vitamina E, vitamina B12 y ácido fólico, benefician al cerebro.
Para realizar el trabajo, el equipo recolectó información de las dietas de 2.148 personas sanas de más de 65 años durante un promedio de 4 años. Se les hizo pruebas para detectar Alzheimer cada 18 meses.
De ellos, 253 desarrollaron la enfermedad, que es incurable. Los menos propensos a contraerla consumían más ensaladas a base de aceite de oliva, frutos secos, pescado, tomates, aves de corral, brócoli, frutas y vegetales de hojas verdes, además ingerir menos carnes rojas, vísceras o productos lácteos ricos en grasas.
«Las personas que adhirieron más a este patrón dietario tuvieron una reducción de cerca del 40% en el riesgo de desarrollar la enfermedad», indicó Gu para luego agregar que probablemente la dieta trabaja de dos formas. Debido a que es rica en alimentos buenos para el corazón, podría proteger al cerebro de apoplejías que lo podrían volver vulnerable al Alzheimer.
Sin embargo, también podría ser que ciertos nutrientes, como ácidos grasos omega-3, antioxidantes y ácido fólico, protejan directamente al cerebro.
Los tratamientos actuales ayudan a combatir algunos síntomas, pero no pueden revertir el curso del Alzheimer, una forma de demencia degenerativa que afecta a más de 26 millones de personas en todo el mundo.