Los restos de la melliza Marisol Oviedo, quien murió en la Fundación Favaloro mientras esperaba un trasplante pulmonar, fueron velados en la sede del club Talleres, en pleno centro de la ciudad de Córdoba. El cuerpo de la joven, de 19 años, fue trasladado desde Buenos Aires en una ambulancia.
Marisol, quien padecía fibrosis quística, estaba internada desde el 12 de diciembre pasado y por la gravedad de su estado había sido incorporada por el Instituto Nacional Centro Único Coordinador de Ablaciones e Implantes (Incucai) a la lista de Emergencia Nacional para ser trasplantada.
Sus restos fueron velados hasta el mediodía y para su inhumación se trasladaron a un cementerio de Alta Gracia, al sur de la ciudad de Córdoba.
Marisol recibió el último adiós de familiares y amigos y del pueblo de Córdoba en general en la sede de Talleres, el club de sus amores, ubicada frente a la plaza San Martín.
Maribel, su hermana melliza, padece también la misma enfermedad, pero el 18 de enero de 2012, con sus padres Ernesto y Mariana como donantes vivos, fue trasplantada en la ciudad brasileña de Porto Alegre, y se recupera favorablemente.
