Para evitar un falso diagnóstico de hipertensión, hay que tener en consideración que la lectura de presión arterial podría variar significativamente de un día a otro, e incluso de una hora a la siguiente, así que no reacciones exageradamente si obtenés una lectura alta en cualquier momento.
Si tu presión arterial permanece consistente o crónicamente elevada es cuando podrían ocurrir problemas de salud significativos.
Factores que influyen
Las siguientes variables también podrían afectar la validez de tu lectura de presión arterial:
• Manguito de presión arterial incorrecto: Si tenés sobrepeso, tomar la lectura con un manguito de presión arterial promedio producirá una lectura de presión arterial falsamente elevada, por lo que es mejor asegurarte que tu médico o profesional de la salud utilice un brazalete de un tamaño adecuado para tu brazo.
• Posición incorrecta del brazo: Si tomás la presión arterial, cuando tu brazo está paralelo al cuerpo, la lectura podría ser de hasta 10% más elevado de lo que realmente es. Las lecturas de presión arterial se deben tomar siempre con el brazo en un ángulo recto al cuerpo.
• Nerviosismo: La «hipertensión de bata blanca» es un término utilizado cuando una lectura de presión arterial alta es causada por el estrés o el miedo asociado a una visita al médico u hospital. Esto podría ser una preocupación transitoria pero seria. Si esto se aplica en tu caso, la clave es reducir el estrés.
Para disminuir el riesgo de ser diagnosticado falsamente con hipertensión en esta situación, tomá un momento para calmarte (asegurate de llegar a tu cita antes de tiempo para que puedas relajarte), luego respirá profundamente, y relajate cuando te tomen la presión arterial.
Hay que medir los dos brazos
Muy recientemente, los investigadores instan a los proveedores de salud a medir la presión arterial dos veces, una vez en cada brazo. Varios estudios han revelado que tener una diferencia significativa entre la presión del brazo izquierdo y derecho podría indicar problemas circulatorios que aumentan riesgo de derrame cerebral, enfermedad arterial periférica u otros problemas cardiovasculares.
Es normal tener ligeras variaciones en la presión arterial entre izquierdo y derecho, pero cuando la diferencia es de cinco puntos o más, podría indicar problemas.
Un estudio británico encontró que las personas con una diferencia de cinco puntos o más, entre los brazos, tenían casi el doble de riesgo de morir de una enfermedad cardíaca en los siguientes ocho años.
Otro análisis de 20 estudios encontró que las personas que tenían una diferencia en la presión arterial de 15 puntos o más, entre los brazos derecho e izquierdo, tenían el doble de probabilidades de padecer una enfermedad arterial periférica en los brazos y/o piernas.
En las personas más jóvenes, las diferencias de lado a lado en la presión arterial podrían ocurrir cuando un músculo o algo más comprime una arteria que suministra el brazo, o por un problema estructural que evita que haya un flujo sanguíneo suave a través de una arteria.
En las personas mayores
En las personas de edad avanzada, esta diferencia es generalmente debido a un bloqueo ocasionado por la aterosclerosis, el proceso de la enfermedad de obstrucción arterial como causa de la mayoría de los ataques cardíacos, derrames cerebrales, enfermedad arterial periférica y otras enfermedades cardiovasculares.
Una causa menos común de que haya una diferencia entre los brazos, en cuanto a la presión arterial, es una disección aórtica. Esto es un desgarre dentro de la pared aórtica, la vía principal de sangre oxigenada del corazón a todo el cuerpo.
En la próxima visita al médico, podés solicitarle que te tome la presión arterial en ambos brazos. Si hay una diferencia mayor a 10 puntos, otra prueba que podría realizar es el denominado índice tobillo-brazo, con el fin de detectar una enfermedad arterial periférica.