Un estudio publicado en la revista Current Biology afirma que los niños pequeños tienen una tendencia a seguir a la multitud. Esta sensibilidad, no es exclusiva de los humanos, ya que los chimpancés también son propensos a imitar hábitos, si “todos los demás los hacen”.
Esta conclusión proviene de la evidencia de que los chicos de 2 años de edad, y los chimpancés imitan acciones más fácilmente cuando ven que tres de sus compañeros la realizan en lugar de uno.
«Creo que poca gente esperaba encontrar que los niños de 2 años de edad ya están influenciados por la mayoría», afirma Daniel Haun, de los Institutos Max Planck de Antropología Evolutiva y Psicolingüística.
Los resultados de este estudio prueban que los seres humanos y los chimpancés comparten estrategias de aprendizaje social. Por otro lado, los orangutanes no parecen sentir la misma influencia por parte de la mayoría.
El equipo de Haun construyó una caja con tres agujeros, cada uno de un color diferente. La caja entregaba un regalo, sólo cuando se dejaba caer una pelota en uno de los tres agujeros. Los niños, los chimpancés y los orangutanes, no familiarizados con la caja, pudieron ver cómo cuatro de sus compañeros, de la misma especie, se comunicaban con la caja -la mayoría habían sido entrenados para favorecer a un solo color sobre los demás.
Como resultado, los observadores de 2 años de edad, y los chimpancés tendían a favorecer el agujero elegido por sus compañeros; en contraste con los orangutanes, que eligieron entre los agujeros, de forma aleatoria.
Haun concluye que «la tendencia a adquirir las conductas de la mayoría se ha planteado como clave para la transmisión de estrategias de comportamiento seguras, confiables y productivas».