Un nuevo estudio demostró que hallar una cura para el VIH/sida es más difícil de lo que temían los científicos. Es porque el reservorio del VIH, las células infectadas por el virus que quedan latentes durante el tratamiento antirretroviral y se activan cuando éste se abandona, podría ser hasta 60 veces mayor de lo que se esperaba.
La reciente investigación, publicada en la revista Cell, fue liderada por el histórico investigador Robert Siliciano, quien había descubierto anteriormente que los reservorios de VIH eran dinámicos y que tenían memoria de resistencia a los fármacos.
Expertos afirman que este hallazgo explicaría por qué el virus normalmente se reactiva rápidamente cuando una persona con la infección deja de tomar drogas antirretrovirales.
El estudio liderado por el prestigioso investigador Robert Siliciano, explica que tan sólo aquellos medicamentos que ataquen los virus durmientes podrían llevar a una cura o remisión completa de la enfermedad.
El investigador español José Alcamí, director del área de Patología Molecular del Centro Nacional de Microbiología, explicó al diario El Mundo que el trabajo cambia por completo la cuantificación que se hacía hasta el momento del reservorio, ya que se creía que había un virus latentes por cada 1.000 CD4, es decir, que era muy pequeño.
Lo que demostró Siliciano es que en lugar de una por cada mil, hay 60 células más infectadas capaces de replicarse. Según Alcamí “era algo que se sospechaba, porque era extraño un reservorio tan pequeño en un virus tan bien adaptado”.