Un nuevo examen de sangre no invasivo que permite revelar eventuales anomalías cromosómicas del feto durante el embarazo. Con este test, que estaría disponible dentro de 2 o 4 años, se podrá dejar de lado la amniocentesis, una prueba prenatal común en la cual se extrae una pequeña muestra del líquido amniótico que rodea al feto, y el análisis de fragmentos de placenta.
Esta información fue proporcionada por investigadores holandeses durante la 26° asamblea anual de la Sociedad Europea de reproducción humana y embriología (ESHRE). Los científicos esperan que el test pueda estar en todas las clínicas en ese lapso de tiempo.
La técnica utilizada permite revelar el ADN fetal presente en la sangre de mujeres embarazadas de al menos 6 u 8 semanas y forma parte de una serie de pruebas ya existentes utilizadas en todo el mundo para descubrir anomalías cromosómicas en el líquido amniótico y en muestras de placenta tomadas con métodos invasivos.
El test es económico y proporciona los resultados en 24 a 62 horas. Hasta el momento fue utilizado con muestra tomadas durante procedimientos invasivos porque no se sabía si funcionaría en el ADN fetal de las muestras de sangre de mujeres embarazadas.