Un aditivo para carburantes figuraba en el gel de las prótesis mamarias defectuosas de la empresa francesa PIP, en el centro de un escándalo mundial, reveló este lunes la radio francesa RTL, mientras los abogados de las víctimas pedían más análisis a la Agencia de Seguridad Sanitaria de ese país.
Según esta emisora, las prótesis de Poly Implant Prothèse (PIP) contenían una mezcla de productos encargados a grandes grupos de química industrial que jamás fueron objeto de ensayos clínicos para determinar su eventual nocividad para el organismo humano.
Entre ellos había un aditivo para carburantes, Basylone, así como Silopren y Rhodorsil, utilizados en la industria del caucho. Aparentemente, dichos productos provocaron la ruptura de estos implantes.
«Según la Afssaps (Agencia Francesa de Seguridad Sanitaria de los Productos de Salud), se sabía que se trataba de un gel impropio, más bien utilizado en el sector alimentario y la informática», declaró Dominique-Michel Courtois, médico asesor de una asociación de utilizadoras de prótesis PIP,.
«No se podía pensar que el gel pudiera contener un aditivo para carburantes. Es por eso que se piden análisis de prótesis tomados directamente en las pacientes», agregó uno de los abogados de las demandantes, Philippe Courtois. Según esta fuente, las pruebas de la Afssaps sólo se hicieron en prótesis incautadas en un allanamiento en la empresa PIP en marzo de 2010.
De acuerdo con Courtois, también se deberían hacer análisis en el extranjero, después de la revelación en la prensa británica de una tasa de ruptura de las prótesis PIP mucho más elevado en el Reino Unido.