Buscan implementar nuevas estrategias ante el rebrote de tos convulsa

En la Argentina la cantidad de casos de enfermos por tos convulsa se duplicó en apenas 3 años, pasando de 1607 enfermos a 3085 casos en 2008. Si bien el grupo más afectado son los niños que no superan el  año de vida, en especial los menores de seis meses, los adolescentes y adultos también pueden verse afectados por la enfermedad. Por este motivo, en el marco de una conferencia de prensa, médicos infectólogos recomendaron la inmunización de este grupo como estrategia para proteger a chicos. En relación al aumento de casos reportados, el calendario oficial de vacunación contempla desde este año la incorporación de un refuerzo obligatorio contra tos convulsa a los 11 años, momento en el que se estima que el niño perdió la inmunidad recibida con las primeras dosis de vacunas.

 

«Los anticuerpos que genera la vacuna contra la tos convulsa caen significativamente después de cinco a siete años de aplicada. Por ese motivo, desde hace ocho meses, se tomó la precaución del refuerzo obligatorio a los púberes, aunque en mi opinión, se debería agregar otro en la adolescencia», declaró el Dr. Eduardo López, Jefe del Departamento del Hospital de Niños Ricardo Gutiérrez en diálogo con DocSalud.com, previo a una conferencia de prensa de la que fue partícipe.

 

En el evento también participaron el Dr. Roberto Debbag, Asesor Científico de la Fundación del Centro de Estudios Infectológicos (FUNCEI) y el Dr. Rolando Ulloa, pediatra infectólogo costarricense quién relató un plan aplicado en su país, la estrategia capullo, que consiste en inmunizar a las puérperas inmediatamente después de dar a luz. Es que esta enfermedad, también conocida como pertussis, posee una alta mortalidad en recién nacidos, y el promedio de edad de los decesos en Costa Rica durante un rebrote fue en bebés de tan sólo 48 días.

 

Con el objetivo de imitar la estrategia, los resultados preliminares de un estudio realizado por el Programa de Infectología Pediátrica del Hospital de Niños Ricardo Gutiérrez, con la participación de la Universidad de La Plata, el Instituto Malbrán y la Maternidad del Hospital Santojanni, revelaron que el 36% de las puérperas pueden enfermarse por no poseer los anticuerpos necesarios, con el consecuente riesgo de contagiar a sus bebés. El Dr. López, explicó que la investigación detectó además que “el 49% de los recién nacidos son susceptibles de contagiarse porque no tienen suficientes anticuerpos”.

 

El médico relató que el estudio, en el que participaron no sólo este grupo sino también hombres y mujeres en edad fértil, pero que no fueron madres recientemente, fue hecho a ciegas, es decir, que el especialista que analizaba las muestras no sabía quién era el donante. Los resultados demostraron que las puérperas presentaban mucho menos anticuerpos protectores que otras poblaciones, y, al no poseer suficientes, el bebé resulta vulnerable.

 

A nivel mundial, según cifras de la Organización Mundial de la Salud (OMS), se reportan anualmente 18 millones de casos de tos convulsa y más de 250 mil de ellos terminan por cobrarse la vida del paciente. En los países en vías de desarrollo, la tasa de mortalidad en los niños menores de un año que contraen pertussis es de un 4%, por lo que es actualmente considerada como la quinta causa de muerte provocada por enfermedades prevenibles a través de la vacunación.

 

Durante los últimos cinco años, existió en América Latina un aumento de casi el triple de enfermos informados a la OMS. En Argentina, hubo 643 casos reportados en 2003 y 3085 en 2008, mientras que en Costa Rica, la cifra ascendió de 27 a 2024 en el mismo período. Por ese motivo, el Dr. Rolando Ulloa, quien se desempeña en el Servicio de Infectología del Hospital Nacional de Niños de Costa Rica enfatizó durante la conferencia de prensa en que «hay que intervenir en salud pública oportunamente con las vacunas».

Para combatir la pertussis se sugiere la estrategia capullo, que en Costa Rica también incluyó la vacunación de los padres que estaban en contacto con niños menores de un año. Los resultados fueron, por demás, favorables. Al haber un rebrote en 2006, con 80 hospitalizaciones y ocho bebés fallecidos, en abril de 2007 se implementó el plan. Tras la experiencia, no hubo ninguna muerte a causa de la enfermedad en el país.

Durante 2008, en Argentina, hubo cerca de 300 niños hospitalizados, y 30 de ellos murieron. «Esta enfermedad infecciosa, que en los más pequeños puede presentar convulsiones, suele poseer un 10% de mortalidad entre los casos de esta población, tasas mucho mayores a las de otros padecimientos, y esto no sólo ocurre en los países en vías de desarrollo, sino que se da a nivel global», relató López.

 

Pero otro dato curioso sobre la pertussis -cuya transmisión es por vía aérea y  presenta como síntomas ataques de tos de hasta 30 minutos, dificultades para respirar, apneas y vómitos- es que el 22% de la población argentina que la padece tiene entre 9 y 40 años

 

En diálogo con DocSalud.com, López adjudicó el rebrote a que «en Argentina bajaron las coberturas de vacunación», y para la tos convulsa «se requiere un 95%» de protección». Como soluciones propuso que el Estado adopte un rol «más pro-activo» y entre las medidas implementaría «que los centros atiendan sábado y domingo, para que las madres que trabajan puedan llevar a sus niños a aplicarse las dosis, acercar móviles a las villas y también vacunar en las plazas y jardines maternales». Por otro lado opinó que se debería imitar «la iniciativa de Canadá y Costa rica» de adoptar la estrategia capullo, porque la mayoría de las madres recientes no tienen títulos de anticuerpos suficientes, que se pasan a través de la sangre del cordón umbilical».

DEJA UNA RESPUESTA

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí