La primera dama de EEUU, Michelle Obama, presentó las nuevas recomendaciones alimenticias de su Gobierno, que abandonan su tradicional representación gráfica de una pirámide para reemplazarla por un plato.
En un acto en el Departamento de Agricultura junto con el secretario Tom Vilsack y la asesora de Salud del Gobierno, Regina Benjamin, Obama dio a conocer el nuevo gráfico, que trata de facilitar a los consumidores el decidir qué ponen en sus platos para recibir una alimentación saludable.
Según declaró la primera dama, «es un recordatorio simple y rápido para que todos nosotros seamos más conscientes de lo que comemos y como madre, puedo decir cuánto va a ayudar a los padres en todo el país».
«Cuando papá o mamá llegan a casa tras un largo día de trabajo ya se nos pide que seamos chefs, árbitros y limpiadores, así que añadirle ser además nutricionista es complicado», reconoció.
«Pero sí que podemos mirar los platos de nuestros hijos, y con tal de que tengan una mitad de verduras y frutas y la otra mitad de proteínas no grasas, lácteos sin grasa y cereales integrales, es perfecto. Es así de fácil», explicó Obama.
La nueva imagen, a la que se ha dado el nombre de «MyPlate», divide un plato en cuatro porciones iguales: una de fruta, otra de verduras, una tercera de proteínas y una cuarta de cereales integrales. Se añade además un vaso, que representa los lácteos.
Entre las recomendaciones que acompañan a la nueva representación gráfica se encuentra la de «evitar las porciones excesivas» y «disfrutar de la comida, pero comer menos».
La mitad del plato debe estar lleno de frutas y verduras y al menos la mitad de los cereales que se consuman debería ser integral, según estas recomendaciones, presentadas en enero.
Además es conveniente que la leche que se consuma sea baja en grasa o desnatada, beber agua en lugar de bebidas azucaradas y tratar de ingerir poca sal.
La antigua imagen, la «Pirámide de Nutrición», representaba los grupos alimenticios en forma triangular, donde los alimentos que más se debían ingerir se encontraban en la base y aquellos que debían consumirse con menos frecuencia o cantidad, en lo más alto.
Según el Departamento de Agricultura, la pirámide «se percibía como pasada de moda y demasiado complicada» para los ciudadanos de a pie, que se lamentaban de recibir información contradictoria, aunque seguirá disponible para los profesionales de la nutrición y de la salud.
El nuevo icono «se centra en una imagen familiar, un plato», y busca transmitir a los ciudadanos la información que necesiten para tomar decisiones saludables a la hora de alimentarse.
En concreto, se busca dirigirse a los individuos y familias, que ven complicado mantener una vida sana; a las organizaciones y los sectores, que intentan promover comportamientos nutricionales positivos, y a las agencias gubernamentales, que supervisan programas de nutrición o distribuyen información alimentaria.
