La cifra de muertes por ébola en el oeste de Africa sigue en aumento y llegó a 1.350, de los cuales 106 corresponden a los dos últimos días contabilizados, confirmó hoy la Organización Mundial de la Salud (OMS).
De estos decesos, 95 tuvieron lugar en Liberia, donde la situación es más grave y se considera que es vital contener la propagación del virus si se quiere controlar este brote, que también afecta a Guinea Conakry, Sierra Leona y, en menor medida, a Nigeria.
Según la información recibida por la OMS de las autoridades sanitarias de los países afectados, los casos de ébola ascendieron hasta los 2.473, de los cuales 972 fueron en Liberia y 907 en Sierra Leona. Se considera que en estos dos países, que acumulan 576 y 374 muertes, respectivamente, la transmisión del peligroso virus es alta.
En Guinea Conakry, con 579 personas infectadas, de las que 396 han muerto, el ritmo de transmisión ha disminuido gracias al nivel de sensibilización que se logrò entre la opinión pública y a «soluciones» que la OMS considera «innovadoras». En Nigeria, la situación es estable con 15 casos y cuatro fallecidos.
Por otra parte, la OMS informó de que está haciendo importantes esfuerzos de comunicación con compañías y organizaciones que negocian en Africa, pues le preocupa la decisión de ciertas firmas de suspender sus servicios a los países donde hay casos de ébola.
Mencionó, en particular, los casos de aerolíneas y compañías de cargo, que con ese tipo de medidas están provocando que estos países «empiecen a experimentar escasez de bienes básicos, incluidos alimentos y combustibles».
La OMS y el Programa Mundial de Alimentos, el principal brazo humanitario de la ONU, emprendieron una operación para suministrar alimentos a un millón de personas en las cuatro localidades de Guinea, Sierra Leona y Liberia puestas recientemente en cuarentena.
Esto, sin embargo, no cubre todas las necesidades, pues son 1,3 millones de personas las que necesitan recibir alimentos en las zonas más afectadas por el ébola, según una evaluación del PMA.
Una vez más, la OMS insistió en que debe entenderse que el virus del ébola no se transmite por el aire y que las personas se infectan por contacto directo con fluidos corporales. Se trata de la saliva, la sangre, el vómito o la diarrea de una persona que ha sido confirmada como un caso de ébola o que ha muerto por esta enfermedad.
Además, una persona que ha contraído el virus sólo puede transmitirlo una vez que empieza a mostrar síntomas del mal y no durante el periodo de incubación.