El Senado Nacional convirtió ayer en ley un proyecto para promover la reducción del consumo de sodio en la población, además de dar media sanción a la modificación de la Ley de Protección al Diabético en relación a los tratamientos y otro para ampliar los alcances de la Ley Celíaca.
La Cámara alta aprobó por unanimidad la iniciativa para disminuir la ingesta de sodio en la población, a través de programas implementados por el Ministerio de Salud de la Nación. El texto, que ya contaba con sanción de Diputados, fija los valores máximos de sodio que deberán alcanzar los grupos alimentarios a partir de los doce meses de entrada en vigencia de la Ley. En ese sentido, la cartera sanitaria puede fijar periódicamente la progresiva disminución de esos valores máximos a partir de los dos años.
De acuerdo con el proyecto las pequeñas y medianas empresas productoras de alimentos deberán alcanzar los valores máximos de los grupos alimentarios a partir del plazo de 18 meses a contar desde la entrada en vigencia de la Ley. Además se deberá incluir en los envases en que se comercializa el sodio los mensajes sanitarios que adviertan sobre los riesgos que implica su excesivo consumo.
Se considerarán infracciones la comercialización de sal en sobres que superen los máximos de sodio establecidos, omitir la inserción de mensajes sanitarios y carecer en los establecimientos gastronómicos de menús alternativos sin sal.
También por decisión unánime, el Senado dio media sanción al proyecto para modificar la norma de problemática y prevención de la diabetes, respecto de la actualización, cobertura y adecuación de los tratamientos farmacológicos y tecnológicos de esa enfermedad.
El proyecto, impulsado por un grupo de senadores radicales, que debe ser aprobado por Diputados para que sea Ley, establece que el Estado debe llevar el control estadístico y prestar colaboración científica y técnica a las autoridades sanitarias de todo el país, a fin de coordinar la planificación de acciones.
Asimismo, deberá garantizar la producción, distribución y dispensación de los medicamentos y reactivos de diagnóstico para autocontrol a todos los pacientes con diabetes, con el objeto de asegurarles el acceso a una terapia adecuada, así como su control evolutivo.
Además, de aprobarse, el Ministerio de Salud de la Nación deberá establecer normas de provisión de medicamentos e insumos que deberán ser revisadas cada cinco años y actualizadas de acuerdo con los avances farmacológicos y tecnológicos que resulten de aplicación en la terapia de la diabetes y promuevan una mejora en la calidad de vida de los pacientes.
La Cámara alta también aprobó y giró a Diputados una iniciativa que modifica la Ley de Celiaquía con el fin de que los medicamentos incluyan -al igual que los alimentos- la aclaración acerca del contenido o no de gluten.
El proyecto también establece que se deben garantizar dietas para celíacos en institutos de menores, cárceles, empresas de transporte que incluyan servicios de alimentos a bordo, restaurantes, bares, kioscos y locales de comidas rápidas.