Primero fue el sarampión. Ahora la hepatitis A. En el último tiempo, deportistas y fans argentinos que estuvieron en Sudáfrica contrajeron infecciones que actualmente pueden prevenirse. La clave está en saber cuáles son las afecciones más frecuentes en otros países, cómo se contagian y qué medidas tomar para prevenirlas.
La hepatitis A es una enfermedad infectocontagiosa producida por un virus, que provoca inflamación en el hígado.Esta enfermedad se contagia por consumo de agua contaminada o alimentos crudos lavados con agua contaminada con materia fecal de personas infectadas. También se transmite de persona a persona, en situaciones de malas condiciones de higiene. Después del contacto con el virus, el período de incubación hasta la aparición de los síntomas es prolongado, entre 15 y 45 días en promedio.
Esta infección se presenta como una enfermedad febril aguda, con ictericia (color amarillento de piel y mucosas), falta de apetito y malestar. En los niños pequeños, la mayoría de las infecciones se dan en forma asintomática, o provocan síntomas leves sin ictericia.
La hepatitis A se puede prevenir: la medida más eficaz y segura de prevención es a través de la provisión de agua potable, cloacas y condiciones sanitarias a toda la población. Es fundamental cumplir las medidas de higiene personal como lavarse frecuentemente las manos, particularmente en la preparación de los alimentos y después del uso del toilette. También se previene con la administración de gammaglobulina y con la vacunación.
En Argentina, en el año 2005 la vacuna contra la hepatitis A fue incorporada al calendario nacional de inmunizaciones con una dosis al año de edad y, de acuerdo a las normas nacionales de vacunación (edición 2008),la vacuna se administra en individuos susceptibles que pertenezcan a grupos de riesgo, como los que viajan a áreas endémicas, entre otros.
En nuestro país, el virus de la hepatitis A se distribuye de manera heterogénea en las diferentes regiones endémicas según el acceso a agua potable y la provisión de cloacas. La situación en Sudáfrica es prácticamente similar, por lo que se recomienda la indicación de la vacuna a los que visitan este país. De la misma manera y en virtud de la epidemia de sarampión en ese territorio, el año pasado se recomendó a las personas que viajaban a disfrutar del mundial que conocieran su historia de vacunación para evitar ser contagiados.
Sumado a la situación de viaje, algunas competencias deportivas y particularmente el rugby, debido a que es un deporte de contacto, presentan un mayor riesgo de infecciones, como, por ejemplo, hepatitis en general, infecciones de piel y mucosas, entre otras.
En el mundo actual globalizado, el número de personas que viaja ha aumentado exponencialmente. Hace ya algunos años se creó una especialidad en Medicina del viajero, para ofrecer información actualizada y personalizada sobre la prevención de enfermedades y de accidentes según el destino elegido. Entonces, antes de viajar, ya sea por trabajo, placer o competencia deportiva, infórmese con tiempo para poder disfrutar completamente de su estadía y no tener sorpresas al regreso.
Centros de consulta al viajero
•Servicio de Medicina del Viajero Hospital Francisco Muñiz.
• División Medicina del Viajero de Stamboulian.