El Ministerio de Salud de la Nación indicó hoy que el déficit mundial de la vacuna triple bacteriana –dTpa – que previene la difteria, el tétanos y la tos convulsa, y se aplica a embarazadas y chicos de 11 años, no afectará la estrategia de prevención de estas enfermedades en la Argentina, en virtud de las medidas implementadas oportunas para dar una respuesta eficiente a una situación extraordinaria.
La escasez, según se informó, deviene de un problema interno del fabricante del insumo, por lo que se demoró la provisión a nivel global. Ante este escenario y por las potenciales irregularidades en la recepción de la vacuna, se había pensado en utilizar las vacunas en stock para inmunizar a embarazadas y esperar que la situación se regularizara en 2014.
Pero ahora la doctora Carla Vizzotti, responsable del Programa Nacional de Control de Enfermedades Inmunoprevenibles (PRONACEI) de la cartera sanitaria nacional explicó la estrategia argentina para sortear la escasez mundial de ese insumo y precisó que entre octubre y noviembre estarán ingresando al país más de 800 mil dosis destinadas a inmunizar a embarazadas y adolescentes.
En concreto, en el mes de octubre estarán llegando a Argentina 400 mil dosis de una vacuna similar destinada a inmunizar a adolescentes de 11 años, mientras que en noviembre ingresarán 440 mil dosis de vacuna dTpa para prevenir la tos convulsa en 396 mil.
“Desde principios de año el ministerio de Salud está contemplando esta situación derivada de la imposibilidad del Fondo Rotatorio de la Organización Panamericana de la Salud (OPS) y el laboratorio productor de entregar vacuna bacteriana durante 2013, y en función de ello se ha priorizado la vacunación exclusiva a embarazadas y la adquisición de 400 mil dosis de una vacuna similar que la reemplace para vacunar a los adolescentes”, indicó Vizzotti.
“De esta manera el Estado dio respuesta en forma efectiva a una situación extraordinaria que nos excede”, consideró Vizzotti, quien recordó que ya en mayo de este año, técnicos de esa cartera y expertos en vacunas se habían reunido en el ámbito de la Comisión Nacional de Inmunizaciones (CONAIN), y habían recomendado “priorizar la estrategia vigente en Argentina desde 2012, vacunando exclusivamente a embarazadas (a partir de la semana 20 de la gestación) e indicar vacuna similar como alternativa viable para la vacunación de adolescentes”.
El documento emitido por los especialistas el pasado 28 de mayo había agregado: “Se deja constancia que enfrentamos una situación dinámica que requerirá de acciones oportunas y consensuadas tendiendo en cuenta la situación epidemiológica de la tos convulsa en nuestro país y en el mundo, la provisión concreta de vacunas, entendiendo que debe ofrecerse una solución alternativa a discontinuidad de la provisión de dTpa”.
Luego de aclarar de que se “han realizado encuentros con los jefes de Programas de Inmunizaciones de las provincias para realizar acciones intensivas”, Vizzotti indicó en este sentido que “hay que tener tranquilidad” y “saber que el objetivo como país, consensuado con los expertos y los responsables de la vacunación de las provincias, es disminuir la mortalidad por tos convulsa en los lactantes menores de 6 meses, por eso lo importante es lograr alcanzar con la vacuna a las 396.000 embarazadas que nos restan vacunar este año”.
En tanto, sobre la vacunación en adolescentes Vizzotti dijo que “tiene como objetivo aportar a la disminución de la circulación de la bacteria y de esta manera beneficiar a los lactantes en forma complementaria, por este motivo se prioriza la vacunación de la embarazada que demostró ser la estrategia más efectiva para lograrlo”.
“Durante los próximos meses estaremos convocando a la población a vacunarse y al equipo de salud a colaborar con esta estrategia, porque es una responsabilidad de todos dar respuesta como equipo ante situaciones criticas y estamos seguros que lo vamos a lograr”, dijo Vizzotti, quien informó que a raíz de una solicitud del ministerio a la OPS, se adelantó una licitación que asegura la provisión de este insumo para el año 2014.
La estrategia de inmunizaciones contra la tos convulsa implementada por el Ministerio de Salud logró que en 2012 la mortalidad de bebés lactantes por esta causa disminuyera un 57,2 por ciento, lo que significó que 40 niños menos murieran respecto del mismo período de 2011.