El médico Claudio Fantini, miembro de la Asociación Argentina de Alergia e Inmunología Clínica (AAAeIC), sostuvo que la inmunoterapia es «el único tratamiento etiológico de las enfermedades alérgicas», al celebrarse por primera vez en la Argentina la Semana de la Inmunoterapia.
Fantini explicó a Télam que «el tratamiento de inmunoterapia con alérgenos solo puede ser prescrito por un alergólogo tras realizar un diagnóstico exacto».
«La inmunoterapia con alérgenos, también conocida como ‘desensibilización o vacunas para la alergia’, es el único tratamiento que actúa directamente sobre el sistema inmunitario para reequilibrarlo, mediante la inducción del aumento de la tolerancia a los alérgenos», explicó el médico.
La terapia «puede administrarse por vía subcutánea, con inyecciones en el brazo practicadas en un entorno médico, o sublingual, en gotas o spray que se administran debajo de la lengua», completó el especialista.
La semana de la Inmunoterapia se celebrará todos los años en la tercera semana de junio, este año bajo el lema «el único tratamiento capaz de controlar y modificar la evolución de las enfermedades alérgicas», con el apoyo de la Organización Mundial de la Alergia (WAO, por sus siglas en inglés).
Fantini alertó que el 25% de la población mundial «padece algún tipo de alergia» y aclaró que «muchos asocian las alergias al sistema respiratorio, que se producen en mayor medida en primavera y otoño, que es cuando se reproducen los ácaros, pero también hay alergias alimentarias producidas por transgénicos, colorantes y otros productos».
En cuanto a las perspectivas de futuro, «los avances que se han producido en el conocimiento de los mecanismos de las reacciones alérgicas y en las técnicas de ingeniería genética, con alérgenos purificados, recombinantes o péptidos, auguran un futuro aún más venturo para la inmunoterapia, que sin dudas redundará en beneficios de la población alérgica», expresó Fantini.
El especialista contó que una alergia respiratoria «es el resultado de un mal funcionamiento del sistema inmunitario que provoca que el organismo reaccione de manera anormal frente al contacto con los alérgenos, que son sustancias normalmente inofensivas».
Los principales alérgenos respiratorios son los ácaros del polvo doméstico, el polen, el pelo de animales y los hongos, que al ser inhalados pueden producir reacciones inflamatorias en la nariz, los ojos, la garganta y los bronquios, lo que se conoce como «rinitis» o «asma alérgica», y en ese marco Fantini señaló que «el 80% de los pacientes con asma son alérgicos».
La alergia puede causar complicaciones como infecciones de los oídos, sinusitis o adenoiditis, especialmente en niños; apnea del sueño y sus consecuencias, alteración del sueño, fatiga y mala concentración.
La presidenta de la AAAeIC, Debora Seigelshifer, informó que «las alergias están experimentando un importante incremento en todo el mundo y en la actualidad 400 millones de personas en el mundo sufren de rinitis y son más de 300 millones los afectados por asma», y ejemplificó que esta última enfermedad «ocasiona hasta 250.000 muertes cada año, por lo que constituye un importante problema de salud pública».
Seigelshifer reseñó que «las enfermedades alérgicas se encuentran entre las más frecuentes y costosas enfermedades crónicas de las sociedades occidentales» y ejemplificó que «la rinitis alérgicas generan sólo en Estados Unidos un costo anual que excede los 11 billones de dólares y en Europa los costos se estiman en 1 a 1.5 billones de euros».
Por su parte, el médico Claudio Parisi, director Científico de la AAAeIC, refirió que «la inmunoterapia con alérgenos reduce de manera significativa los síntomas de la alergia y el uso de medicamentos sintomáticos», y aseguró que «a diferencia de los fármacos sus efectos son duraderos aún después de finalizado el tratamiento».
«Este tratamiento es efectivo para la alergia respiratoria, como rinitis y asma, y para la alergia al veneno de insectos como abejas, avispas y hormigas coloradas», acotó el especialista.
Parisi alertó que «la enfermedad alérgica puede empeorar con el tiempo» y sostuvo que «la inmunoterapia administrada en los pacientes con rinitis alérgica disminuye significativamente el riesgo de desarrollar asma en un futuro y podría evitar el desarrollo de nuevas alergias, y disminuye los costos en comparación con el tratamiento farmacológico en alrededor de un 30%».
En tanto, Daniel Vázquez, secretario General de la AAAeIC, hizo hincapié en «la base científica sólida de este tipo de tratamientos», aclaró que «la inmunoterapia con alérgenos es un tratamiento dirigido que implica la administración de dosis progresivamente mayores de extractos de alérgenos al paciente, lo que reducirá la hiperreactividad del sistema inmunitario y la inflamación resultante» y señaló que el tratamiento «tiene una duración media de 3 a 5 años».