Los pañales descartables representan un monto considerable de dinero dentro de los gastos de los padres recientes. Y si bien son considerados indispensables, existen algunas familias que adoptan un método de crianza que evita usarlos. Su nombre en inglés es Elimination Communication(EC), denominación que hace referencia a la comunicación que se debe establecer con el niño sobre sus ganas de hacer pis y caca.
Este método se basa en que mediante la observación, los cuidadores empiezan a comprender el ritmo natural de evacuación del pequeño, así como las pistas que brinda mediante sonidos o movimiento corporal, y en lugar de dejarlo hacer sus necesidades en el pañal, llevan al niño a la pelela o al baño desde un primer momento, según reprodujo la BBC.
«Existe la noción de que los bebés se liberan inesperada y constantemente durante el día, pero, al contrario, los bebés de manera natural eliminan heces y orina en momentos predecibles, como al despertarse o después de comer», escribieron en una editorial de la revista Pediatrics dos médicos californianos Jeffrey Bender y Rosemary She, que probaron esta estrategia con su tercer hijo. En síntesis, el “método sin pañal” propone entrenar a los padres para estar en sintonía con el bebé.
Los pediatras no suelen recomendar una edad específica para que los chicos empiecen a usar la pelela, pero la mayoría de los padres empieza a pensar en abandonar el uso de los pañales cuando sus hijos tienen entre 18 meses y dos años. De hecho, la página web del servicio de salud pública británico (NHS), sugiere a los progenitores “ir despacio y al ritmo de su hijo”.
De acuerdo a las directrices generales de los pediatras, este método no afecta a los pequeños. Quienes lo propulsan, además del evidente ahorro en dinero y la disminución de la contaminación, destacan como ventaja una mayor conexión con el bebé y un menor riesgo de que aparezca dermatitis del pañal.
