En el mes internacional del cuidado de la fertilidad, es importante destacar que los problemas para lograr un embarazo no sólo es un tema de mujeres sino que también los hombres deben ocuparse. La infertilidad masculina es bastante común y afecta a cerca del 40% de las parejas que no pueden concebir.
Se dice que un hombre es infértil cuando ha mantenido relaciones sexuales con su pareja durante un año y sin usar métodos anticonceptivos y aún así no se logra el embarazo. En un 20% de los casos, la infertilidad es tratable y logra resultados satisfactorios.
En las mujeres es común hablar del reloj biológico, es sabido que la fertilidad en ellas declina luego de los 30 años. ¿Con el varón pasa lo mismo, tiene un reloj biológico? ¿Cuál es la edad ideal para ser padre? La creencia popular sostiene que los hombres son viriles durante toda su vida y capaces de tener un hijo sin importar su edad biológica, pero lo cierto es que a partir de los 40 años su fertilidad declina en un 70%. A medida que el varón envejece, el ADN presente en su esperma comienza a fragmentarse, es decir se provocan roturas o lesiones en el material genético del espermatozoide, lo que provoca infertilidad.
Hay ciertas cosas que los hombres podrían hacer para retardar o disminuir la velocidad de su reloj biológico, como practicar ejercicio regularmente para así poder mejorar el estado general de su salud y mantener un peso corporal sano y saludable.
Otros factores que impactan en la disminución de la fertilidad masculina son el tabaco y el alcohol. El consumo de cigarrillos se asocia al estrés oxidativo, que parece determinar reducciones en la concentración y movilidad espermáticas y alteraciones cromosómicas.
La movilidad espermática es el parámetro del espermograma, que más marcadamente se altera con el tabaquismo y es proporcional a la cantidad consumida. En los grandes fumadores se observa una reducción del 20 al 30% del volumen del eyaculado, del recuento espermático y de su movilidad.
Según estadísticas de tabaquismo de la Organización Panamericana de la Salud, las parejas en las que el hombre fuma más de 15 cigarrillos diarios tardan más en lograr un embarazo espontáneo.
Con respecto al alcohol, su ingesta excesuva se relaciona con alteraciones en la calidad seminal (teratospermia: alteraciones morfológicas que pueden afectar la capacidad reproductiva y oligospermia: baja cantidad de espermatozoides en el semen). En casos extremos se observa atrofia testicular, impotencia y disminución de la líbido.
Se ha evidenciado además una asociación entre la obesidad y la alteración de los parámetros seminales y niveles más bajos de testosterona. Los espermatozoides tienen a tener menos movilidad que los hombres con peso normal.
Es muy importante que si el varón sospecha estar padeciendo insuficiencia hormonal, desórdenes o trastornos espermáticos o testiculares, consulte de manera inmediata al médico para de esta manera poder obtener el asesoramiento adecuado de un especialista en fertilidad y encontrar la solución o tratamiento ideal para cada caso en particular.
*La Dra. Andrea Marazzi, Tocoginecóloga, especialista en Medicina Reproductiva, Directora médica de Fertilab