En el marco la Conferencia Internacional del Sida, llevada a cabo el pasado mes en Viena, se reveló la situación del VIH a nivel mundial. Si bien en algunas regiones la epidemia se estabiliza, en otras todavía está en ascenso. En el segundo grupo no sólo se ubica Europa del Este sino también el área de América Latina y El Caribe, nuestro país incluido.
La Dra. Isabel Cassetti, infectóloga y Directora Médica de Helios Salud, se hizo presente en el evento, en donde también se presentó un microbicida de aplicación vaginal para la prevención de mujeres en un contexto vulnerable. Pero a pesar de los avances que aparecen año tras año, la especialista afirmó que en ningún lugar del mundo la epidemia pudo ser controlada definitivamente, por lo que hay que seguir trabajando.
Dado que no todos los portadores del virus en Argentina conoce su situación serológica, Cassetti relató que la situación de la epidemia se mide, en principio, con números estimados, donde se llega a una cifra a través de modelos matemáticos. Según este parámetro, son alrededor de 140 mil personas las que viven con VIH. Ese total abarca a los infectados (aquellos que poseen un análisis positivo pero que no presentan síntomas) y a los enfermos, es decir, “quienes han tenido males asociados, como determinados tipos de neumonías o meningitis”, puntualizó la infectóloga.
Por otra parte, existen los datos reportados al Ministerio de Salud que, según explicó la doctora, son “los fidedignos”. “A partir del año 2001 se reportan al Programa de Sida los infectados, es decir, quienes son VIH positivos pero que no sienten nada. Pero cuando comenzó la epidemia sólo se reportaban los enfermos”, puntualizó Cassetti. En la actualidad son tan sólo 60 mil personas las registradas, de las cuales alrededor de la mitad son portadoras y la otra presenta enfermedades asociadas, males oportunistas o tumores.
El género es otro punto a revisar si de mediciones se habla. “Vemos que todavía existe un predominio de hombres que viene acumulativo”, pero en proporción “las mujeres están aumentando mucho”, puntualizó la doctora. Durante los últimos años el porcentaje de infectadas femeninas estuvo equiparando al masculino.
“Prácticamente el 90% de nuestras mujeres se infectan por vía heterosexual; pero ya no hablamos más de comportamientos de riesgo, como que sean parejas de usuarios de droga, sino que se da por contactos ocasionales”, reveló la infectóloga. Por otra parte señaló que el contagio por esta vía también aumentó en el género masculino y hasta incluso supera la transmisión de los hombres que tienen sexo con hombres, que se daba primariamente en el pasado.
Por último, si de edad se habla, las infecciones en mujeres aparecen principalmente entre los 23 y los 32 años, siendo esta cifra un poco más alta en los hombres. Por otra parte, más allá de los géneros, otro grupo etario castigado por la infección son los mayores de 45.
