Un total de 7,4 millones de muertes prematuras por tabaco serán evitadas en 41 países hasta 2050 gracias a una serie de medidas de control del tabaco adoptadas entre 2007 y 2010, como el aumento de los impuestos o las prohibiciones de publicidad.
Así lo revela uno de los primeros estudios sobre el número de muertes evitadas desde la entrada en vigor del Convenio Marco para el Control del Tabaco, en 2005, adoptado bajo el auspicio de la Organización Mundial de la Salud (OMS).
«Es un descubrimiento espectacular que los gobiernos puedan salvar tantas vidas con la puesta en marcha de estrategias sencillas para controlar el (consumo de) tabaco», comentó el autor principal del estudio, David Levy.
Las seis medidas identificadas por la OMS como las más eficaces para reducir el consumo de tabaco son: el control del consumo y las estrategias de prevención, la protección de las personas de la exposición al humo y las ayudas para abandonar el hábito de fumar.
Asimismo, resultan efectivas las advertencias sobre los peligros del tabaco, el incremento de los impuestos y las prohibiciones para su publicidad, promoción y patrocinio.
Según el estudio, únicamente la subida de las impuestos evitaría cerca de la mitad de las 7,5 millones de muertes prematuras provocadas por el tabaquismo.
Para llegar a estas conclusiones el estudio se basó, entre otros elementos, en que uno de cada dos fumadores fallece prematuramente por alguna enfermedad relacionada con el tabaco.
Bajo esa lógica, los científicos estimaron que la adopción de una o de varias de esas medidas en los 41 países analizados -entre los que están Argentina, Colombia, España, Guatemala, Honduras, México, Panamá y Perú- podrían prevenir la muerte prematura de la mitad de los 14,8 millones de fumadores que abandonaron el hábito, es decir de unas 7,4 millones de muertes.
Además de los fallecimientos evitados, las medidas de control del tabaco pueden contribuir a disminuir los casos de nacidos con bajo peso debido al tabaquismo materno o a rebajar los gastos de atención sanitaria, indicó Levy.
Si bien Argentina firmó el Convenio Marco en 2003 y manifestó su intención de ser parte, no lo ratificó posteriormente, por lo que no pudo entrar en vigor en el país.
La OMS recordó que el consumo de productos de tabaco es la principal causa evitable de muertes y actualmente es motivo del fallecimiento de uno de cada 10 adultos en el mundo.
Así, el hábito de fumar mata cada año a casi 6 millones de personas, de las cuales más de 600.000 son fumadores pasivos, y los expertos vaticinan que, de no frenarse esta adicción, el número de muertos superará los 8 millones en 2030.