Oficialismo rechaza cambiar ley para recetar con nombre genérico

Ayer se había obtenido un dictamen en plenario de comisiones para reformar la actual legislación, que también permite sugerir una marca comercial. El bloque del PRO indicó que la propuesta "ya está contemplada en la actual legislación. 

El plenario de las comisiones de Salud y Defensa del Consumidor, donde se obtuvo dictámen.

El bloque de diputados del oficialismo rechazó hoy el dictamen impulsado por la oposición para cambiar la ley de medicamentos genéricos porque sostiene que esa propuesta ya está contemplada en la actual legislación y pidió debatir reformas estructurales como una política de productos medicinales.

La postura de Cambiemos fue expresada por el diputado macrista y especialista en temas de salud, Sergio Wisky, quien adelantó que ya presentó un dictamen en rechazo al texto propiciado por la oposición por considerar que «seria redundante hacer esta reforma porque ya está contemplado en el artículo 7 de la ley de genéricos aprobado en el 2002».

La ley 25649, que se busca modificar, establece que los médicos deben prescribir el medicamento por su nombre genérico, pero se les permite indicar en la receta su nombre comercial.

Un plenario de las comisiones de Salud y de Defensa del Consumidor, que conducen la kirchnerista Carolina Gaillard y la massista Liliana Schwindt, emitió ayer un despacho para impedir que los médicos puedan prescribir con el nombre comercial, con el cual los farmacéuticos serán los únicos encargados de recomendar los medicamentos.

«Nosotros queremos que la Comisión de Salud funcione como corresponde con una agenda acordada, sin sorpresas y desprolijidades en las citaciones a los funcionarios, para analizar proyectos estructurales sobre la política de salud y no con proyectos marketineros que no aportan nada a la población», apuntó Wisky.

En declaraciones a Télam, el diputado del PRO dijo que esa reforma de la ley de genéricos «no tiene sentido y no le cambia nada a la gente» y destacó la importancia de «aplicar una política para prevenir las enfermedades que tienen el mayor indice de mortalidad como las cardiovasculares, el tabaquismo, la obesidad y el colesterol».

Wisky recordó que en las últimas licitaciones a través del Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo «aumentamos un 90% los productos adquiridos y redujimos un 46% su precio unitario. De esta manera, mientras en 2014 se invirtieron 44 millones de dólares para adquirir 334 millones de unidades de diversos medicamentos; en 2016, con 45 millones se compraron 635 millones de unidades».

«Nosotros no compramos aspirinetas como se hacía en el pasado sino los remedios claves para bajar estas enfermedades que son las principales causas de la mortalidad», apunto.

El diputado aseguró que se debe trabajar en las prevención de enfermedades graves para «evitar los altos costos que implican sus tratamientos y (que) consumen el 35% del presupuesto de salud, en la red nacional de prestadores y en una política de medicamentos para que tengamos transparencia en los precios en la cadena de comercialización».

 

DEJA UNA RESPUESTA

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí