Una ley que prohíbe a los fumadores fumar en el auto en presencia de menores entra en vigor este jueves en el Reino Unido. La normativa, que afecta a todos los vehículos privados, sancionará a aquellos que la incumplan, incluyendo al conductor o a cualquiera de los pasajeros, con una multa de 50 libras.
La medida, similar a otra vigente en Gales, tiene como objetivo evitar que los jóvenes menores de 18 años se conviertan en fumadores pasivos y, de ese modo, incrementar el riesgo de contraer numerosas enfermedades, entre ellas el cáncer.
Según la Fundación Británica del Pulmón (BLF, en sus siglas en inglés), más de 430.000 niños están expuestos cada semana de forma pasiva al humo dentro de los coches.
La Cámara de los Comunes aprobó una enmienda sobre esta cuestión en 2014, que fue respaldada por 376 votos a favor frente a 107 en contra, después de que la coalición entre conservadores y liberaldemócratas otorgase libertad de voto a sus diputados.
Esta norma se suma a otras medidas que el Reino Unido tomó a lo largo de los últimos años en su lucha contra el tabaco, como la prohibición de fumar en los puestos de trabajo o en los lugares públicos cerrados, y la venta de cigarrillos en máquinas expendedoras.
También se esperan nuevas normas de control de tabaco para 2016, como la prohibición de fumar en las cárceles, que empezará a aplicarse en Gales y en cuatro prisiones inglesas a partir de enero. Se calcula que en el país el 80% de los reclutas fuma. Por ende, para amortiguar el impacto de la ley, el gobierno comenzó a distribuir cigarrillos electrónicos y a ofrecer ayuda a los que quieran dejar el cigarrillo.
