La justicia de Rosario autorizó a una mujer de 44 años a donarle un riñón a su mejor amiga de 54, que está con tratamiento de diálisis por un cuadro grave de insuficiencia renal, informaron fuentes judiciales.
El aval del juez en lo Civil y Comercial N° 14 de Rosario, Marcelo Quaglia, fue dictado tras constatarse que la paciente en lista de espera del Instituto Nacional Central Único Coordinador de Ablación e Implante (Incucai), no tiene compatibilidad para una donación de parte de sus familiares directos consanguíneos, consignaron a Télam voceros judiciales.
«Nos conocemos desde hace 15 años porque somos vecinas y apenas comenzó todo esto no dudé en ofrecerme para donarle un riñón porque es algo que siempre estuvo en mi, desde que era chica, siempre decía que si alguna vez tenía la oportunidad me gustaría ayudar de esa manera», reveló a la prensa, Silvia Sirili la amiga donante de la paciente de nombre Ana.
Tras agradecer la decisión tomada por la justicia, contó que el la petición comenzó hace un mes y que en las audiencias a las que tuvo que asistir con su familia cómo sería su vida tras la donación.
«Quiero brindar un mensaje esperanzador porque se puede vivir con un riñón y esto debe ser divulgado para que la gente sepa que cualquiera pueda concretar un acto así», aseveró la mujer, casada desde hace 25 años y que tiene dos hijos de 21 y 17 años.
«Nunca pedí autorización a mi familia porque cuándo les avisé la decisión ya estaba tomada y ellos me apoyaron y vivimos este tiempo con absoluta naturalidad», contó.
Sobre el origen del pedido judicial, apuntó «que Ana está casada, tiene un hijo adolescente, su padre es una persona mayor de 80 años y ninguno resultó ser compatible en su sangre para la donación, entonces me ofrecí yo sin dudarlo aunque ella al principio no quería».
«Todo esto lleva un año, mientras tanto, ella sigue con diálisis y de verdad no se puede esperar más, por suerte salió el pedido judicial», aseguró finalmente Sirili.
Asimismo, la abogada de las amigas, Carina Mezzeo dijo en declaraciones a LT8-Rosario «que ellas están muy contentas y los médicos tratantes también. Ellos coinciden en sostener en que estos temas no son conocidos y deben hacerse públicos».
Para la abogada, experta en derechos de la salud, «es mucho mejor la donación de riñones con personas vivas que cuando llega el órgano de un donante cadavérico. Con este órgano de una persona viva, Ana tendrá más probabilidades de supervivencia y de mejor calidad de vida».
