María Cristina Portillo Martínez, de 27 años, falleció durante la tarde del jueves en una clínica de Recoleta luego de que le hicieran un procedimiento de rutina por una lumbalgia.
La joven había acudido a Diagnóstico Médico, ubicado en Junín al 1000, para que le realizaran un procedimiento llamado bloqueo radicular o fascetario, una práctica programada que no duraría más de 20 minutos en la que se administra un medicamento para tratar las dolencias, con anestesia local.
Según un audio difundido por el canal Crónica, una profesional de ese centro le explicaba al marido de la víctima: “Hizo una reacción alérgica que la descompensó, la tuvimos que entubar, vino la emergencia, la reanimamos y no pudimos sacarla».
Según había relatado un familiar a la señal televisiva, la joven era alérgica a los medicamentos y que se lo había comentado a los médicos. «Ni podía tomar paracetamol, porque se enronchaba entera», contó.
Diagnóstico Médico emitió un comunicado firmado por su director, el doctor Alfredo Buzzi, en el que este afirma haberse puesto «a disposición» de los familiares, amigos y abogadas de la víctima y explica que se realizó la denuncia con el fin de que «la justicia desarrolle la labor de su competencia»
