La soledad es tan dañina para la salud como el tabaquismo o el sobrepeso, según un nuevo estudio realizado por la Universidad Brigham Young, que invita a los médicos a considerar también el entorno social a la hora de evaluar a un paciente.
El equipo encabezado por Julianne Holt-Lunstad realizó un análisis de 148 estudios sobre el riesgo de muerte, que reunió datos de más de 300.000 personas, con un promedio de edad de 64 años, mayoritariamente de países occidentales.
Las investigaciones los observaron durante un promedio de 7,5 años y las conclusiones arrojaron que quienes poseen un buen círculo de amistades y conocidos tienen una probabilidad de supervivencia un 50% mayor que las personas con un entorno social más restringido, concluyeron los investigadores según el estudio publicado en la revista «PLoS Medicine».
El efecto de la falta de redes sociales es casi tan grande como el tabaquismo, y supera muchos factores de riesgo, como el sobrepeso y la falta de actividad física. Además, se mantiene independientemente de la edad, el sexo y el nivel social.
El mayor efecto de todos los factores medidos lo tuvo la integración general, mientras que no era muy determinante si la persona vivía sola o con otros.
El entorno social tiene consecuencias sobre el manejo de la propia salud y los procesos psicológicos como el estrés y las depresiones, explicaron Holt-Lunstad y colegas.
Cualquier acción para incrementar la vida social mejora tanto la capacidad de supervivencia como la calidad de vida, informaron los especialistas que recomendaron que la prevención de la salud incluya el tema social, que los médicos estimulen los contactos con otras personas y las clínicas fomenten las redes para los pacientes.
«Médicos, expertos en salud, maestros y los medios toman muy en serio factores como el tabaquismo, la alimentación y el deporte. Los datos presentados aquí ofrecen un argumento sólido para agregar a esta lista los factores sociales», subrayaron los autores.