Representantes de clínicas privadas que se reunirán este martes con el titular del PAMI, Carlos Regazzoni para negociar un aumento de los aranceles en la prestaciones que otorgan a las obra social de jubilados, admiten que están cerca de la quiebra por los montos escasos, según confirmaron a DocSalud.com.
El representante de la Asociación de Clínicas, Sanatorios y Hospitales Privados de la República Argentina (ADECRA), Jorge Cherro, explicó que las clínicas ofrecen sus servicios a más de 5 millones y medio de beneficiarios de PAMI.
“Es una vergüenza que con la devaluación de los últimos meses sólo hayan aumentado los aranceles de las prestaciones un 4%, que aún no cobramos”, agregó.
“Como está planteada la situación, será imposible evitar el quebranto de muchas clínicas y sanatorios privados”, remarcó Cherro y enfatizó en que “las clínicas cada vez se endeudan más y les cuesta retener personal”.
Desde ADECRA argumentaron que el PAMI paga aranceles prestacionales muy inferiores a lo que abonan las obras sociales provinciales.
De hecho la entidad indicó que por una neumonía el PAMI paga un tercio del valor abonado por una obra social provincial, o en el caso de una práctica quirúrgica como una RTU de próstata abona menos de la mitad que una obra social provincial.
“Las propias autoridades de PAMI han reconocido que lo que pagan a las clínicas está muy por debajo del mercado, pero hasta el momento no han modificado la situación”, agregó Cherro.
“Ya pasaron cinco meses y las clínicas y sanatorios agonizan y sólo hay promesas en los medios de comunicación pero soluciones concretas ninguna”, sentenció Cherro.
Asimismo, desde ADECRA denunciaron que existen problemas en la entrega de prótesis que debe suministrar el instituto y que los proveedores argumentan que no lo entregan porque PAMI no habría cumpido con los pagos.
“De a poco, clínicas y sanatorios van perdiendo la capacidad de atender a los enfermos del instituto de jubilados. Basta señalar que el PAMI paga por una consulta médica sólo 65 pesos. Y con el comienzo del invierno, nadie sabe quien atenderá la demanda que se incrementa en esa época”, dijo Cherro.
“El panorama sigue siendo desalentador, y solicitamos a las nuevas autoridades que de una vez por todas se pongan al frente de esta situación y actúen rápidamente porque el cierre de clínicas y sanatorios está cada vez más cerca, pero lo más grave es que está en riesgo las salud de nuestros abuelos”, finalizó.