Un tratamiento pionero para tratar el cáncer de mama, que permite reducir la radioterapia a una sesión de media hora, está dando buenos resultados en los ensayos con pacientes, según médicos del University College de Londres.
La prueba, utilizada después de extraer el tumor en casos en que el cáncer no está en fase avanzada, mata las células cancerígenas que pudieran quedar con una emisión concentrada de radiación.
Actualmente, las mujeres con cáncer de mama se someten a cinco sesiones de radioterapia que duran unas seis semanas después de la intervención quirúrgica, que trata de conservar la mayor parte del pecho en lugar de una mastectomía, según los especialistas.
Los médicos confían en que, una vez que salgan publicados los resultados de los ensayos a finales de este año, pueda ofrecerse una sola terapia de radiación (conocida en sus siglas en inglés como IORT), según los expertos, encabezados por el oncólogo Michael Baum, cuyos estudios publica el diario «The Times».
El procedimiento consiste en la introducción de un aparato esférico, del tamaño de una bolita, en la zona donde estaba el tumor a través de la incisión creada durante la operación y mientras el paciente aún está bajo los efectos de la anestesia. El aparato irradia una dosis constante de rayos X alrededor del lecho tumoral, de acuerdo con los médicos.
Según «The Times», los resultados de esta prueba, que ha llevado diez años, serán presentados en la conferencia de la Sociedad Americana de Oncología Clínica en Chicago (EEUU) el próximo junio.
Los investigadores esperan mostrar que el IORT es seguro y efectivo como las sesiones convencionales de radioterapia.
Hasta la fecha, en la fase número 3 de las pruebas clínicas han participado 77 pacientes en el Reino Unido, Alemania y Australia. De estas mujeres, sólo dos -de una edad promedio de 66 años- volvieron a tener cáncer de mama en el mismo lugar.
Baum ha manifestado su optimismo sobre este tratamiento, ya que permitiría a los pacientes pasar después a las terapias con fármacos, quimioterapia u hormonales.
«The Times» indica que la radioterapia convencional es ofrecida a las mujeres sometidas a la cirugía para conservar el pecho.
«La razón -dijo- por la que la radioterapia convencional es utilizada un largo periodo de tiempo es porque todo el pecho es tratado ante el temor de una reaparición en otra parte del pecho». «Pero en la gran mayoría de las reapariciones, en torno a un 90%, se da en el lugar (donde estaba antes) el tumor«, agregó.
El oncólogo ha indicado que el aparato, cuyo costo está estimado en unos 342.000 euros, es portátil, por lo que su acceso puede ser ofrecido a mujeres que viven lejos de las unidades de radioterapia, especialmente en el mundo en desarrollo.