Un nuevo test permite estudiar a través del endometrio -la mucosa que recubre el útero- desequilibrios inmunológicos de la mujer que pueden manifestarse sólo como fallas reproductivas pero que anticipan enfermedades aún no declaradas, informaron especialistas en medicina traslacional.
Además de estudiar la falta o pérdida de embarazos, el Test del Estado Inmunológico del Endometrio, recientemente validado por el Conicet, detecta afecciones autoinmunes como tiroiditis de Hashimoto, o celiaquía, informaron sus fabricantes.
Otras de las enfermedades que puede detectar el endometrio -que hace las veces de sensor- son alteraciones gastrointestinales como la enfermedad de Crohn; y reumáticas, como lupus o sjogren; las vasculitis y el síndrome antifosfolipídico (trombosis).
«El endometrio tiene la particularidad de ser un tejido que se regenera en forma constante y es el único capaz de generar nuevos vasos sanguíneos ciclo tras ciclo. Es por eso que tiene la potencialidad de delatar diversas patologías aún no declaradas en forma sintomática», dijo a la agencia Télam Gabriela Gutiérrez, investigadora del Conicet, y fundadora de Inmunogénesis, una empresa tecnológica que se dedica a aplicar los avances de la investigación en la medicina práctica.
«Lo interesante es que la paciente encuentre la causa a su problema. Hoy en día aún en caso de éxito hay pacientes que no saben a qué se debe su infertilidad», explicó Soledad Mayol, médica de la elaboradora.
En el 80% de los casos investigados a través de este test, informó Gutiérrez, «la tasa de bebés nacidos era del 8% y pasó a ser, después del estudio, diagnóstico y tratamiento, del 78%».
Pero además de los problemas de infertilidad, se decubrió en el endometrio «la punta del ovillo para detectar otras enfermedades no declaradas, cuyos síntomas podrían manifestarse en 20 o 30 años».
«Lo valioso de este descubrimiento es que podemos actuar tempranamente reduciendo el impacto de los gatillos ambientales como el tabaquismo, el sedentarismo, o los malos hábitos alimentarios si sabemos que con el paso de los años esa mujer tendrá muchas posibilidades de desarrollar, por ejemplo, una celiaquía», señaló Gutiérrez, al mencionar como aliados la actividad física, la alimentación, la incorporación de vitaminas, y el cambio de hábitos.
Para la investigadora, el test permite «prevenir riesgos pero no a través de medicamentos sino a través de los gatillos ambientales».
El test es un servicio que Argentina y Brasil ya está ofreciendo en base a la investigación aplicada, y si bien es útil en fertilidad, está orientado a la prevención mediante un algoritmo de diagnóstico y tratamiento basado en la medicina personalizada.
Estudiar en detalle el endometrio y su estado particular, dijo Gutiérrez, es «central para la medicina reproductiva, ya que es un tejido que actúa como una especie de sensor, y es capaz de regular la continuidad, o no del embarazo, si algo del cuerpo de la futura mamá no está del todo bien, o si sufre algún proceso de inflamación, aunque no se hayan expresado aún otros síntomas».
Para la paciente el procedimiento es simple: debe concurrir en un día determinado para que se le haga una biopsia y un análisis de sangre y con los resultados en la mano y en interconsulta con los profesionales de la clínica de fertilidad de la paciente, el equipo médico recomienda un tratamiento que, en un gran porcentaje de casos que siguen las indicaciones, facilita la concreción del embarazo.
Todos estos procedimientos han sido validados científicamente y, de hecho, la compañía está actualmente asociada al Conicet de Argentina en las regalías económicas que pueda generar este tratamiento para las parejas con dificultades de concepción.
«La empresa ya está ofreciendo servicios innovadores, basados en investigaciones de profesionales de Argentina, que estarán disponibles para todas las clínicas de fertilidad de la región de América Latina», asegura Gutiérrez, que señaló que «se trata de un servicio de salud absolutamente nuevo, que todavía no existe ni es brindado en otros laboratorios del mundo»
Desde Brasil, Tatiana Michelon, directora del Centro de Inmunologia da Reproduçao, sostuvo que «esta tecnología es la dirección que debe tomar la medicina porque tiene en cuenta al paciente en lo individual».
«No se trata además de sólo hacer un test sino de continuar con un tratamiento por eso es un gran complemento para médicos y centros de fertilidad que podrán encontrar un nuevo conjunto de causas que hasta ahora no estaban dentro del radar de lo que se hace normalmente», completó.