El Dr. Daniel Stamboulian, quien preside la Fundación del Centro de Estudios Infectológicos (FUNCEI) destacó la importancia de las vacunas en las personas que viven con VIH. Lo hizo ayer en el Simposio Internacional de Inmunizaciones, que finalizó ayer en El Calafate, en coincidencia con la conmemoración del Día Mundial de Lucha contra el Sida.
Stamboulian recordó que “en 1988, casi 18 años después de que aparecieran los primeros casos, se instaló el día 1 de diciembre para que todos nos acordemos, conmemoremos y pongamos esfuerzo en la lucha” contra esta enfermedad.
“Nuestro país es privilegiado porque si cualquier persona está infectada y no tiene recursos, el Ministerio de Salud lo cubre y todos reciben el tratamiento”, expresó el especialista. En cuanto a los desafíos actuales, sostuvo que se calcula que en la Argentina hay 120.000 personas infectadas y sólo 60.000 lo saben, “por lo que hay que preconizar porque hoy el que sabe que está infectado puede recibir tratamiento, pasar de una enfermedad fatal a una crónica y también controlarla epidemiológicamente para que no contagie”.
Al ser consultado sobre la incorporación al Calendario Nacional de Vacunación de la vacuna antigripal, Stamboulian manifestó: “Es algo por lo que venimos luchando desde hace muchos años porque es la mejor herramienta y así lo ha demostrado la campaña de este año”.
En ese sentido, el Ministro de Salud de la Nación, Juan Manzur, aseguró que “la vacunación, como política de Estado, es un elemento de equidad en la población”, ya que “las vacunas no sólo evitan la enfermedad, sino que impactan directamente en los indicadores sociales, económicos, sanitarios y en la salud colectiva”.
En la última década, las estrategias de inmunización adoptadas en el país “han sido consideradas política de Estado y, como tal, se han traducido en números concretos que exponen la efectividad de esta medida en el retroceso o la desaparición de ciertas enfermedades que antes afectaban a miles de personas, y el control de brotes”, señaló el funcionario.
Durante la reunión, ministros de Salud de diferentes provincias, expertos nacionales e internacionales, representantes de sociedades científicas y miembros de la Organización Panamericana de la Salud (OPS) evaluaron los logros alcanzados en materia de inmunizaciones y suscribieron la “Declaración de El Calafate”, un documento que define a las vacunas como un “bien social”.
