Un equipo de cirujanos consiguió reimplantar buena parte del rostro a un niño que fue mordido por un perro en la ciudad mexicana de Monterrey, en el norte de México. Este es el primer reimplante facial exitoso en el país, informó el martes el estatal Instituto del Seguro Social.
«Estamos muy orgullosos de nuestro equipo de profesionales y de la recuperación del pequeño Raúl Carrizalez», dijo Juan Francisco Salazar, vocero del Instituto en el estado de Nuevo León.
El niño, de siete años de edad, fue mordido el pasado 26 de junio por un perro de raza Pitbull, que le arrancó gran parte de la porción inferior del rostro. Un guardia de vigilancia del barrio donde vive el menor presenció el ataque, recuperó la parte del rostro del pequeño arrancada por el animal, la metió en una bolsa de plástico y luego en un contenedor con agua y hielo, gracias a lo cual pudo preservarse y ser reimplantada de inmediato.
Al menor se le reconstruyó el 90% del labio superior, el 60% del labio inferior y un 50% de su mejilla izquierda en una intervención quirúrgica que duró cerca de seis horas y en la que participaron dos cirujanos generales y dos plásticos, dos enfermeras y un anestesiólogo. «El siguiente paso es la rehabilitación para que vuelva a tener sensibilidad y movimiento en su cara», explicó Salazar.
Los cirujanos conectaron vasos sanguíneos y arterias de menos de un milímetro de ancho. El mayor riesgo era la presencia de una infección o una arteria obstruida, pero no se dio ninguno de los casos.