Cómo evitar el desgaste dental que arruina la boca

El desgaste y los cambios propios de la edad perjudican los dientes en los adultos. Claves para prevenirlo.

Cuidados para dientes sanos (Foto: Pixabay)

Con el correr de los años, los riesgos de contraer enfermedades bucales pueden aumentar y, por lo tanto, los controles y cuidados no deben faltar. El desgaste y los cambios propios de la edad dejan su huella en el organismo, como también en la boca.

Existen muchos factores que influyen y favorecen el deterioro de la salud bucal como los cambios en la calidad y cantidad de saliva, alteraciones en la dieta (particularmente un incremento en el consumo de alimentos y colaciones con azúcar) y las dificultades para realizar una higiene oral adecuada.

Otra cuestión que se debe tener en cuenta es que el cuidado bucal varía de acuerdo a si la persona tiene dientes naturales, dentadura postiza o implantes/dentadura postiza parcial.

 

Dientes naturales

Las bocas que aún tienen los dientes naturales deben ser limpiadas al menos dos veces por día, por la mañana y por la noche, con un buen cepillo de dientes y pasta fluorada. La limpieza interdental debe realizarse al menos una vez al día, con cepillos interdentales o hilo especialmente diseñado. Es fundamental elegir un cepillo de dientes con un mango que permita un correcto agarre, que tenga una cabeza pequeña a mediana y cerdas suaves.

 

Dentadura postiza parcial o implantes

Si una persona tiene parte implantes o una dentadura postiza removible o fija se le debe dar el mismo tratamiento que a los dientes naturales, pero se sumará un desafío adicional. Si la dentadura se encuentra atornillada o cementada (implantes), se requerirá de una técnica especial para limpiar alrededor y entre los dientes y encías. Por otro lado, si la dentadura es removible, puede ser retirada mientras que se limpia, cepilla y enjuaga la boca de modo habitual y luego se la reinserta.

 

Consejos para una higiene dental óptima

Los especialistas en el cuidado de la salud dental recomiendan:

  1. Concurrir periódicamente al odontólogo.

  2. Cepillar los dientes al menos dos veces por día con un buen cepillo de dientes y pasta fluorada.

  3. Utilizar cepillos interdentales o hilo dental para limpiar entre los dientes, donde las cerdas del cepillo tradicional no llegan.

  4. Limpiar las dentaduras postizas al menos una vez al día con un cepillo especialmente diseñado para prótesis y mientras no tenga puesta la dentadura, enjuagar la boca para limpiarla.

 

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