La Asociación Médica británica (BMA, por sus siglas en inglés) instó al gobierno de coalición a imponer una prohibición de fumar dentro de vehículos particulares para proteger a las víctimas del tabaquismo pasivos, principalmente los niños.
La BMA exhortó a extender la actual restricción del cigarrillo en lugares públicos, luego de revisar evidencia por los peligros para los que aspiran humo de segunda mano, consignó la agencia Ansa.
Los expertos indicaron que los niveles de toxinas en un automóvil puede llegar a ser 23 veces más altos que en un bar con humo. En tanto, un informe de un grupo pluripartidario de parlamentarios y lores indicó que también deberían considerarse opciones no legislativas para resolver el tema.
El Grupo gubernamental de Salud y Antitabaco dijo además que pedir una prohibición inmediata puede ser «contraproducente», al señalar que primero debe lograrse un consenso general en la población antes de tomarse la medida.
Los legisladores indicaron que se lanzará una consulta sobre cómo resolver el problema de los fumadores en automóviles particulares, que incluya desde la prohibición hasta campañas educativas sobre los peligros para fumadores pasivos.
