James Boysen, de 55 años, acaba de convertirse en la primera persona del mundo en recibir un trasplante de cráneo y cuero cabelludo, en una intervención en la que además recibió un nuevo riñón y un páncreas.
Según informó el sitio BBC Mundo Boysen, dijo estar «sorprendido» de lo bien que se sentía después de la operación, realizada por un equipo multidisciplinario de médicos del Hospital Metodista de Houston en Texas, EEUU, y el Centro de Cáncer Anderson. Incluso bromeó de que ahora tiene más pelo que a sus 21 años.
El hombre había perdido hace casi una década parte del cráneo a consecuencia de un tratamiento contra el leiomiosarcoma, un tipo de cáncer poco común que afecta a los músculos, lo que provocó un daño en los tejidos que rodeaban su cabeza.
Normalmente los médicos hubieran recurrido a una combinación de placas de metal e injertos para reconstruir el cráneo. Pero la delicada situación de su riñón y páncreas, y la medicación con inmunosupresores que estaba ingiriendo debido a un trasplante anterior que ahora estaba fallando, frenó al equipo de realizar la reconstrucción. A su vez, el agujero en su cráneo impedía que los médicos pudieran intervenirlo para que reciba otro trasplante de órganos.
Por ese motivo, el equipo aprovechó que el paciente ya estaba tomando inmunosupresores para evitar el rechazo de órganos y realizar el inédito implante de cráneo y cuero cabelludo.
La idea de ejecutar las dos intervenciones al mismo tiempo había surgido entre los médicos cuatro años atrás, pero tuvieron que esperar un donante.
El doctor Michael Klebu, del Hospital Metodista de Houston, indicó que «fue una operación muy compleja” porque hubo que transplantar tejido con microcirugía.
«Imaginen conectar los vasos sanguíneos 1,5 milímetros utilizando un microscopio con pequeños puntos de aproximadamente la mitad del diámetro de un cabello humano con herramientas que cualquiera podría utilizar para componer un reloj suizo», ejemplificó.
