Si bien el cepillado diario de los dientes y el uso del hilo dental son buenas formas de prevenir la formación de caries, estos métodos no blanquean eficazmente los dientes. Por eso, para un mejor blanqueamiento de los dientes, se suele recurrir a tratamientos de venta libre o tratamientos profesionales que suelen combinar geles que contienen peróxido de hidrógeno y luz azul, lo que produce una reacción química que elimina las manchas de los dientes.
Aunque la combinación elimina la mayor parte de la decoloración, también genera especies reactivas de oxígeno que pueden romper el esmalte. Justamente por el deterioro que le produce los tratamientos de blanqueamiento al esmalte es que los investigadores Xiaolei Wang, Lan Liao y sus colegas modificaron las nanopartículas de dióxido de titanio para conseguir un tratamiento de blanqueamiento dental menos destructivo. El método seguía requiriendo luz azul de alta intensidad que puede dañar la piel y los ojos. Por eso, el equipo de investigación quería encontrar un material que se activara con luz verde, que es una alternativa más segura a la luz azul para blanquear los dientes y prevenir las caries.
Los investigadores combinaron nanopartículas de oxicloruro de bismuto, nanopartículas de óxido de cobre y alginato de sodio en una mezcla espesa y recubrieron uniformemente la mezcla sobre la superficie de los dientes pegados a un portaobjetos y rociaron la mezcla con una solución de cloruro de calcio, formando un hidrogel fuertemente adherido.
Luego, probaron el material en dientes manchados con café, té, jugo de arándanos y salsa de soja en una placa de laboratorio. Los resultados indican que después del tratamiento con el hidrogel y la luz verde, los dientes se volvieron más brillantes con el paso del tiempo y no se dañaba el esmalte.
Otro experimento demostró que el tratamiento mataba el 94% de las bacterias de las biopelículas. Luego, el tratamiento se probó en ratones a los que se les inoculó en la boca bacterias formadoras de caries. El hidrogel activado con luz verde impidió eficazmente la formación de caries moderadas y profundas en la superficie de los dientes de los animales. Los investigadores afirman que su tratamiento, seguro y sin necesidad de cepillado, previene eficazmente las caries y blanquea los dientes.